“Estamos encantados con la acogida y la calidad de los servicios de la ciudad”. María Fernández y su marido Óscar Lerma cogieron a sus hijas Nerea y Saray, se subieron a su autocaravana y aprovechando el fin del estado de alarma partieron desde El Ferrol hasta Oviedo. Así se convirtieron ayer en los primeros visitantes de la oficina de turismo del Escorialín en su reapertura tras más de seis meses de cierre a causa de las restricciones sanitarias.
Montse Ruiz, empleada del servicio municipal recibió a esta familia gallega con los brazos abiertos poco antes de las doce de la mañana, casi tres horas después de subir la persiana. “Quizás la gente todavía no sabe que estamos operativos”, indicó la trabajadora, que inmediatamente después recibió a gente de Burgos, Madrid e incluso turistas llegados de tierras francesas.
La familia gallega abrió camino al resto de visitantes . Ellos salieron de la oficina con un mapa de la ciudad e instrucciones precisas. “Queremos ver la Catedral, El Fontán y Santa María del Naranco, entre otros sitios”, indicó la mujer, entusiasmada con las facilidades encontradas para dejar su vehículo en el aparcamiento especial para autocaravanas de La Corredoria. “Está muy bien preparado, son todo facilidades”, destacó, restando importancia a la lluvia que caía en esos momentos. “Somos de Galicia, estamos más que acostumbrados”, coincidieron en señalar todos los miembros de la familia.
No faltaron tampoco algunas consultas de ciudadanos de Oviedo y algunos llegaron al punto de información con ganas de saber más sobre la gastronomía local. “Para mí lo más importante es comer bien”, indicó un burgalés llegado a la ciudad junto a su hija, desplazada al Principado por cuestiones de trabajo.
La oficina permanecerá a partir de ahora abierta los sábados, domingos y festivos de 9 a 14 y de 16 a 18 horas y de lunes a viernes de 9 a 14 y de 16 a 19 horas.
