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Atasco kilométrico en el acceso a Oviedo por la Autopista tras caer la carga de un camión

Un electricista involucrado en las retenciones consiguió cortar el metal de la bobina que invadía la calzada cortando la circulación

El metal de la bobina caída de un camión obstruyendo ayer el tráfico en la Autopista. | LNE

La caída de una bobina de acero transportada por un vehículo de gran tonelaje provocó a primera hora de la tarde de ayer un atasco kilométrico que colapsó el acceso a la ciudad desde Siero por la Autopista durante más de media hora. Esos largos treinta minutos podría haberse convertido en muchos más de no ser por la iniciativa de un electricista ovetense que, con permiso de la Guardia Civil de Tráfico se ofreció para cortar el metal desparramado que invadía la calzada, consiguiendo restablecer la normalidad en la circulación para alivio de muchos conductores.

El incidente se produjo pasadas las cuatro de la tarde y antes de las cinco menos cuarto el tráfico volvió a ser fluido. La bobina se precipitó justo en el punto en el que la autopista se desdobla en los viales hacia el bulevar de Santullano y la circunvalación de la capital asturiana. Varias patrullas de la Guardia Civil se esmeraban en detener a los vehículos para evitar una desgracia cuando Jorge Sanz, conocido electricista de La Corredoria invitó a los agentes a dejarle intentar cortar las láminas de hierro con sus herramientas. “Ocupaba toda la carretera, pero lo cortamos y los coches pudieron pasar en unos minutos”, indicó Sanz.

A pesar de lograr abrir hueco entre el acero, la Guardia Civil continuó coordinado la circulación hasta que pudo retirarse la carga de toda la carretera para garantizar la seguridad de todos los usuarios de la Autopista. Los funcionarios se mostraron muy agradecidos por la voluntariedad y la pericia del electricista que permitió ganar unos minutos a cientos de viajeros.

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