Las federaciones de vecinos y asociaciones de comercio se reunieron ayer con el Ayuntamiento para conocer las modificaciones que conllevará la nueva ordenanza de terrazas. Se trata de una normativa que será más compleja y minuciosa que las que estaban vigentes y que comienza ahora el procedimiento para su modificación. Desde el servicio han querido singularizar cada una de las plazas y calles de la ciudad. “No tiene sentido una norma que obliga a ocupar el mismo espacio en una plaza como la del Conceyín, en La Corredoria, que en Pedro Miñor, en Valentín Masip, donde los espacios son infinitamente diferentes”, señaló el concejal Nacho Cuesta al término de la reunión

El Alcalde, que presidió el encuentro con las asociaciones, apuntó que siguen “escuchando a los vecinos para conseguir una ordenanza que responda a los intereses de todas las partes implicadas“, y destacó que “es indispensable recuperar cuanto antes la actividad de la ciudad para generar riqueza”. También señaló que “las terrazas son de vital importancia para la capital en ese sentido, pues dan vida a la ciudad y contribuyen a dinamizar el sector comercial”.

Cuesta también reiteró que la nueva ordenanza debe regular “la uniformidad estética del mobiliario en determinadas zonas, como el Oviedo antiguo, especialmente turístico”. Según el edil, la ciudad necesita “una nueva norma que dé respuesta a situaciones específicas que no atiende la actual ordenanza, que tiene un carácter más general”.

El equipo de Urbanismo está preparando una modificación de la ordenanza y desde el Ayuntamiento señalan que pretenden conseguir “el máximo consenso”. En la reunión estuvieron representantes de las federaciones de vecinos FEGEA, FAVO, FEPASA, representantes de independientes y de asociaciones de comercio y del Fontán, así como el director general de Urbanismo, el abogado Jorge Fernández-Mier.

En la actualidad, las terrazas siguen sujetas a la prórroga de la resolución extraordinaria que permite su ampliación. Las prórrogas de esta normativa provisional se seguirán aprobando mientras continúen las restricciones sanitarias. De manera paralela, se comenzará ya a trabajar en la tramitación de la modificación de la ordenanza, que iniciará ahora su procedimiento administrativo, con la consulta previa a los diferentes colectivos implicados, redacción del texto definitivo, información pública y posterior aprobación en comisión y Pleno municipal antes de hacerse efectiva.