El periodista Juan Ramón Lucas acude hoy a LibrOviedo (19.00 horas) para presentar su nueva novela: “Agua de luna”. Una obra en la que el autor profundiza en el drama de una familia ante la captación de su hija por parte del radicalismo. “Es una historia que se centra en la relación entre padres e hijos, que parte de un drama personal, inesperado y devastador, que se produce cuando la hija única de un matrimonio de clase media-alta de un matrimonio en descomposición, aunque ellos no son conscientes de esto, se asoma al mundo islámico y provoca una crisis en la estructura familiar”, avanza el autor, en conversación telefónica con LA NUEVA ESPAÑA.

A partir de esta situación, Juan Ramón Lucas explora en “Agua de luna” diferentes problemáticas asociadas. “Parto de la relación entre padres e hijos para hablar también de de la vulnerabilidad que tenemos ante los ciberataques y ante las redes, y cómo nos desnudamos en este mundo digital, siendo perfectamente inconscientes del riesgo que supone, que es lo que cuenta la novela”, sostiene.

Para contar esta historia, Juan Ramón Lucas opta por una narrativa “en clave de thriller que juega con elementos de suspense policiaco para llegar a un final que creo que el lector no se espera de ninguna manera”.

Durante su labor como periodista, Juan Ramón Lucas se ha ocupado frecuentemente de problemáticas asociadas a los temas que trata en la novela, pero precisa que esta experiencia no fue determinante para que las incluyese en “Agua de luna”. “Hay algo que me preocupa no ya como periodista, sino como ciudadano, que es la vulnerabilidad ante las redes sociales y ante la ciberdelincuencias. Como ciudadano, estoy preocupado por eso, pero además como padre veo que es eterno el desconocimiento que tenemos de los universos en los que se mueven nuestros hijos en las redes”, reflexiona.

Ante esta vorágine, Juan Ramón Lucas tiene claro que a los padres les toca ponerse las pilas y actualizarse a marchas forzadas, para tratar de tutelar adecuamente a sus hijos, en un mundo cada vez más volcado en lo digital. “No somos conscientes del peligro que conlleva todo esto, y no nos va a quedar más remedio que adaptarnos, porque si no lo hacemos, nos va a atropellar. Estamos sometidos a una vigilancia y a una capacidad de control que desconocemos. No nos va a quedar más remedio que ponernos al día y hablar con nuestros hijos. Este mundo está en continúo cambio y si no nos adaptamos nos va a dejar atrás. Pero como padres no podemos permitirlo”, concluye el escritor y periodista.

Tras la presentación de su novela esta tarde en la plaza Porlier, el autor de “Agua de luna” firmará ejemplares de su novela a los lectores.