Las farolas de Oviedo han vuelto a ver la luz. En febrero, el Ayuntamiento se quedó sin contrato de mantenimiento de alumbrado y, casi seis meses después, este podrá volver a funcionar. A finales del año pasado, el Consistorio sacó a concurso el mantenimiento del alumbrado de la ciudad, un contrato con un valor de tres millones de euros anuales. Hasta quince empresas optaron a la licitación y dos de ellas, tras ser excluidas por haber presentado una baja temeraria, presentaron sendos recursos. El Juez ordenó suspender el contrato mientras estudiaba las condiciones y, hasta ahora, no dio su visto bueno a la contratación llevada a cabo por el Ayuntamiento, que había elegido a la empresa Electricidad Llano, contratista habitual del Consistorio y a la que se le pagarán 1.076.000 euros anuales.

Al ser un servicio básico, el área de alumbrado, dependiente de la concejalía de Infraestructuras, siguió dando el servicio de mantenimiento recurriendo a contratos menores mensuales a la empresa que había elegido como adjudicataria. Ahora, podrá dejar de hacerlo.

El contrato de mantenimiento estará vigente durante dos años y podrá ser prorrogado por otros dos. Con las decisiones del Tribunal Administrativo Central se retomará “el funcionamiento pleno del servicio”, apuntan desde la concejalía que dirige Nacho Cuesta.

Así, explican, se realizarán las actuaciones de mejora y modificaciones de la red de alumbrado que estaban pendientes desde el pasado mes de febrero. Uno de los compromisos adquiridos por el equipo de gobierno para este mandato fue el de ir sustituyendo las bombillas de las farolas isabelinas de la ciudad por nuevas luces led.