Dicen que en abril, aguas mil, pero en Asturias el tiempo no entiende de refranes. Ayer, a las ocho de la tarde, “Tiempos Nuevos” volvió a hacer rugir el patio del edificio histórico de la Universidad de Oviedo, pero las nubes esta vez no fueron tan pacientes como en otras ocasiones y el público solo pudo disfrutar en condiciones del primer concierto: el de “Viuda”. El grupo gijonés, formado por cuatro mujeres, hizo la primera aparición del día en un escenario que poco después tuvo que quedarse vacío por un “orbayu” impredecible. “La Plata”, el grupo valenciano que actuaba tras las gijonesas, se tuvo que quedar con las ganas de hacer cantar al público, porque la lluvia apenas les dejó tocar cuatro canciones.
Con un cielo encapotado hasta la médula, los asistentes ya empezaban a hacer fila incluso una hora antes. Dos de ellos eran José Fradejas y Víctor Villar, amigos que unió la juventud pero que conservó la música. Fradejas vive desde hace 24 años en Tenerife, y Villar le esperaba emocionado en la cola porque llevaban más de dos años sin poder verse. “Cuando me dijo que venía le avisé del concierto y decidimos que era el mejor sitio para volver a vernos”, comentaba Villar.
Las sillas habilitadas se llenaron rápidamente una vez las puertas se abrieron. La ilusión de los asistentes se respiraba en el aire. Las jóvenes “Viuda” esperaban con ansias el concierto. “Tener la oportunidad de tocar en un sitio así es increíble”, comentaban las integrantes. El público recompensaría después su actuación, potente y rotunda, con una gran ovación.
Aunque la lluvia no dejó a “La Plata” continuar la travesía musical que comenzaron las gijonesas, los valencianos lucieron su talento durante quince intensos minutos que dejó al respetable con ganas de más, y deseando que algún día retornen para completar lo que ayer iniciaron.
