La Policía Local tuvo que realizar varias intervenciones para disolver, en la madrugada de ayer, diversos botellones que se registraron en un Antiguo absolutamente masificado. La afluencia de personas era tal que los agentes tenían problemas incluso para poder patrullar con normalidad en zonas como las plazas del Paraguas y del Sol, así como en la calle Mon.
En esta última vía, la masificación complicó la evacuación de una menor en estado de ebriedad: la ambulancia desplazada para atenderla no pudo llegar hasta el lugar, como tampoco los coches de Policía, lo que obligó a intervenir a Protección Civil, cuyos voluntarios trasladaron a la joven desde Mon hasta la Corrada del Obispo, donde pudo recogerla la ambulancia, que la trasladó al HUCA.
Los botellones no solo se registraron en el Antiguo. Poco antes de las dos, los agentes tuvieron que intervenir en El Campillín, donde había varios grupos de jóvenes bebiendo al aire libre. La Policía Local dispersó todos los focos y registró denuncias contra 22 personas que participaban en los botellones.
En el Campo San Francisco, la noche fue también movida. Sobre las dos y media, cuando las casetas estaban bajando la persiana, se registró una agresión entre un cliente y uno de los trabajadores de las propias casetas. Posteriormente, la Policía tuvo que disolver varios botellones en el parque, actuación que se saldó con otras tres denuncias.
La intensa noche de juerga tuvo ayer un gran eco en las redes sociales, donde proliferaban las fotografías en las que se constataba la masificación del Antiguo. Las secuelas, por su parte, se dejaban notar a primera hora, ya que las calles del casco viejo amanecieron repletas de basura, lo que obligó a los servicios de limpieza municipales a emplearse a fondo para que la ciudad pudiese estar presentable cara a abordar un nuevo día de celebraciones.
