El sector inmobiliario está de dulce en Oviedo. Lo corroboran los datos: según las estadísticas del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, en el primer semestre de este año se vendieron 1.402 viviendas en el municipio, y entre el 1 de julio de 2020 y el 30 de junio de este año, se han cerrado 2.851 operaciones de compraventa. Un auge que constatan también los agentes del sector: tanto las inmobiliarias como la patronal de la construcción celebran el notable aumento de ventas, que se da en vivienda nueva y de segunda mano, cuyo inicio coincide con el final del confinamiento, en la primera del año pasado.
Joel García, presidente de la Confederación Asturiana de la Construcción (CAC-Asprocon), tiene claro que no se trata de una situación coyuntural. “Creo que el nivel de construcción que hay en Asturias es aceptable, no es una burbuja porque hablamos de entre 1.000 y 1.500 viviendas al año, y es lo normal, es lo que necesita Asturias. Ahora en Oviedo se está dando ese incremento en las ventas, pero es normal que se venda: es una ciudad atractiva para vivir”, reflexiona García. El presidente de la patronal de la construcción también avanza algunas de las claves del cambio de prioridades en las demandas de los compradores: “Hemos tenido que cambiar un poco los modelos de los edificios, y la gente pide tener terraza, es algo muy importante ahora”.
Joel García: “El nivel de construcción que hay en Asturias es aceptable, no es una burbuja. En Oviedo se está dando ese incremento en las ventas, pero es normal que se venda: es una ciudad atractiva para vivir”
Las inmobiliarias corroboran esta tendencia. Roberto Iglesias, de Inmobiliaria Friera y portavoz de la asociación Asiovi, que engloba a inmobiliarias de la ciudad, señala que ahora mismo “salen mucho más rápido los pisos que tienen terraza, buena orientación y ventilación”, y constata que el mercado se está moviendo mucho: “Estamos en un pico alto y ahora funciona todo: venta y alquiler, obra nueva y segunda mano. Hay movimiento”.
María Elvira Vega, de la inmobiliaria Caveda 31, explica que aprecian “una gran demanda de obra nueva, sobre todo de gente que quiere mejorar, que tiene un piso ya en propiedad pero tiene otras necesidades, por lo que quieren vender su piso y apostar por obra nueva con terraza y buena orientación, dos cosas a las que se dan muchísima importancia ahora”. En el caso de su inmobiliaria, Vega señala a una promoción que tienen en marcha en Prados de la Fuente y que está ya reservada a un 60%, cuando restan dos años hasta la conclusión de la obra. “Las notarías están llenas, se vende todo lo que está en precio, las viviendas que tienen un precio razonable. Y los bancos están facilitando la financiación, es algo que ayuda mucho”, sostiene.
María Jesús Iglesias, de la inmobiliaria Degraín, aprecia asimismo la reactivación de operaciones que quedaron aparcadas por la pandemia. “Hay una mejoría en el mercado. Tampoco es que sea un descorche muy fuerte, pero se ve más movimiento y los clientes que tenían aparcadas las operaciones por el covid, las están retomando”. En su inmobiliaria también perciben el cambio de prioridades del cliente: “Todos quieren un poco de terraza, aunque sea pequeñita. Nadie quiere que, si vuelve a pasar, tirarse semanas mirando un patio de luces”.
María Jesús Iglesias: “Tras el confinamiento todos quieren un poco de terraza, aunque sea pequeñita. Nadie quiere, si vuelve a pasar, tirarse semanas mirando un patio de luces”
Jairo Robles, director de Re/Max Vetusta, considera que el aumento de las ventas apunta a “una dinámica consolidada, que va a mantenerse a medio y largo plazo”, auspiciada también por “la facilidad con la que los bancos están concediendo financiación”, y señala que están aumentando “las compras en el extrarradio”. Las nuevas perspectivas de los compradores, explica Robles, incluso han revalorizado viviendas antes denostadas: “Todos quieren terraza, e incluso tipologías que antes de la pandemia nadie quería, como un bajo con terraza o patio, es algo que ahora se demanda”.
Silvia Gutiérrez, de Gestincasa, aprecia especialmente el auge de la vivienda de segunda mano, siempre que cumpla esos requisitos de orientación y terraza. “Hay interés por la vivienda de segunda mano, en el centro de Oviedo y su entorno, y que sean exteriores y con terraza. Son inmuebles muy demandados, pero hay poca oferta”, señala Gutiérrez, que también constata “un auge de pisos para segunda residencia en la costa”.
Este auge del mercado inmobiliario, en cualquier caso, es visto además con optimismo desde otros sectores. Carlos Paniceres, presidente de la Cámara de Comercio de Oviedo, considera que el auge en la venta de viviendas es “una noticia muy positiva en un sector que lo ha pasado mal y que experimenta un proceso expansivo sólido, con operaciones bien financiadas”. Paniceres, como Joel García, considera que este auge del mercado inmobiliario constata “que es atractivo vivir en Oviedo” y considera que “uno de los grandes retos de la ciudad es atraer a gente joven para que vengan a vivir aquí, porque eso revitalizará Oviedo”.
