Los vecinos de San Claudio ultiman movilizaciones para protestar contra los recortes de personal en su centro de salud, que en los últimos tiempos se está traduciendo en continuas cancelaciones de citas con los médicos de familia. El presidente de la asociación vecinal, Luis Miguel Fernández, denuncia que el equipamiento ha pasado de tener dos médicos y dos enfermeros a contar con solo un facultativo y un titulado en Enfermería fijos.

El principal problema es que la consejería de Salud solo cubre las plazas vacantes de manera puntual y aleatoria, causando grandes trastornos a los pacientes. “El miércoles se cancelaron todas las consultas, las reubicaron el viernes y al final también las cancelaron. La gente está harta de esta situación”, declara el representante vecinal, dispuesto a emprender las movilizaciones que hagan falta para forzar un refuerzo en el personal fijo del centro.

La situación lleva produciéndose desde hace unos meses cuando se jubiló uno de los dos médicos con plaza en San Claudio. La vacante provocó una sobrecarga de trabajo para el otro médico y algo similar ocurrió con el caso de los enfermeros. La exigencia vecinal pasa por la inmediata incorporación de un segundo médico que permita repartir la carga de trabajo y ofrecer una mejor atención a una localidad que cuenta con mucha población mayor que precisa atención sanitaria con una mayor frecuencia que los más jóvenes.