Un recinto fabril en ruinas y tres administraciones con planes para sus 120.000 metros de terrenos. La Fábrica de Armas de La Vega, propiedad del Ministerio de Defensa, quiere convertirse en parque, recinto de uso cultural, zona residencial y polo de investigación biosanitaria. La delegada del Gobierno, Delia Losa, se refirió ayer a esta última parte y al acuerdo llamado a reordenar los suelos. “La Vega está abocada a ser un servicio de uso para toda la ciudadanía de Asturias”, apuntó ayer durante una visita a la Fundación para la Investigación y la Innovación Biosanitaria del Principado de Asturias (Finba). La representante del Gobierno central en la región aseguró ser “optimista” con un acuerdo que, asegura, “va a fraguarse”.
Las negociaciones, ahora, plantean conseguir que el Ayuntamiento de Oviedo y el Ministerio de Defensa firmen un protocolo o principio de acuerdo que, se espera, llegue antes de que termine el año. Esos primeros pasos para la reordenación de los terrenos delimitarán las “fronteras” entre lo que será de unos y de otros. Como ya adelantó LA NUEVA ESPAÑA, la parte alta de la Fábrica pasaría a manos del Ayuntamiento, que reurbanizaría los terrenos para hacer un parque y se quedaría con una serie de naves a las que daría usos culturales. En el corazón de La Vega se ubicaría la parte “productiva” del nuevo reparto. A las naves centrales del recinto fabril se las quiere dotar de nuevos usos vinculados a la investigación y a las nuevas tecnologías, como recordó la Delegada del Gobierno. En la parte baja, en una parcela que delimitaría el trazado por el que se desviaría la carretera de entrada a Oviedo, se plantea construir nuevos edificios que contribuyan a costear la operación.
Fuentes municipales aseguran que el protocolo entre las administraciones, antes de que se firme un convenio definitivo, está próximo. En principio, la idea era tener el documento firmado en septiembre; ahora las previsiones son que esté listo antes de que termine el año.
El mes pasado se celebró una reunión sobre los terrenos de La Vega en la que participaron técnicos municipales, el viceconsejero de Infraestructuras, Jorge García, y técnicos del Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (INVIED), el organismo del Ministerio encargado de negociar por los terrenos.
Las fechas que se marcan las administraciones cuadran con el calendario planteado por los fondos europeos Edusi. Europa da 160.000 euros a Oviedo para que elabore una serie de consultas de participación ciudadana durante 2022 y 2023 para definir los proyectos para La Vega. En el documento de los propios fondos europeos se advierte que el proyecto será “a varios años vista” y así será.
La reordenación de los terrenos de La Vega no terminará con la firma del protocolo o del acuerdo. En principio, las administraciones pretenden firmar un convenio. Para reorganizar los suelos y que cambien de titularidad es necesaria una intensa fase de planeamiento que conllevará, entre otras cosas, elaborar un catálogo de elementos protegidos.
Las declaraciones de Delia Losa llegaron después de un encuentro con el director de la Finba, Faustino Blanco, y su equipo. Blanco cree que recibirá previsiblemente “antes de fin de año” la acreditación del Instituto de Salud Carlos III como centro investigador de excelencia. Esta certificación, con la que el Ministerio de Sanidad reconoce la investigación biomédica de alta calidad e interés para la sociedad, supondrá “un antes y un después”, puesto que abrirá las puertas de nuevos recursos de financiación tanto nacionales como europeos.
