Yolanda Calero (Madrid, 1958) lleva dos días al frente de la Asociación Española contra el Cáncer en Asturias (AECC) y ya tiene la libreta "casi llena" de asuntos que resolver, cosas por hacer y ejemplos a seguir. Su trabajo, explica, será continuista sobre lo que ha hecho su predecesora, Margarita Fuente, pero quiere llevar el nombre de la Asociación un poco más allá. "Margarita y su equipo han hecho un trabajo fantástico", sentencia la doctora, especialista en Medicina del Trabajo. Calero salió de Dupont hace unos meses "por la puerta grande". Llevaba en la multinacional tres décadas y se fue "con el cariño de todos", explica.

Esa vinculación a la empresa quiere llevarla también a la Asociación. La nueva presidenta coincide con su predecesora en que queda trabajo por hacer en cuanto a la presencia de la entidad benéfica, que hoy cuenta con unos 14.000 socios, a las alas de Asturias y, también, en que la AECC tiene que tener más presencia en los hospitales de la región, pero apunta a un nuevo reto: afianzar las relaciones con las empresas del Principado. Calero quiere no solo captar nuevos socios, también reforzar la llegada de voluntarios y afianzar la relación de la Asociación con la investigación: "Sin la ciencia estamos perdidos". Una de sus voluntades pasa por apoyar a los investigadores jóvenes y, si puede ser, que también colaboren con la asociación. "Hay que hacer cantera, peor no solo para que investiguen, que es crítico, también para que colaboren de alguna manera con el voluntariado", explica.

La doctora empezó a trabajar en Dupont "a pie de obra" y después desarrolló una exitosa carrera en la multinacional hasta hacerse cargo del área de salud de Europa, Medio Oriente y África. Se fue de allí cuando consideró que su trabajo estaba acabado: "Es como cuando estás pintando un cuadro, sabes cuando empiezas y cuando lo terminas". Con su trabajo hecho en Dupont, Calero decidió postularse a la presidencia del órgano asturiano de la AECC. Su perfil gustó y, finalmente, resultó elegida para sustituir a Margarita Fuente. Todavía, reconoce, está aprendiendo de sus predecesoras y confía en conformar un equipo de gobierno antes de que llegue el 25 de enero. El calendario aprieta, el 4 de febrero es uno de las fechas claves para la Asociación, el Día Mundial contra el Cáncer.

Ni estaba asociada, ni ha padecido la enfermedad, pero tiene experiencias cercanas "como casi todos". Calero se emociona al recordar el fallecimiento de una amiga muy cercana. La nueva presidenta, que dice que aportará ilusión y compromiso, asegura que estará al pie del cañón, haciendo acompañamiento y trabajando codo con codo con la gente. "Sé que la película que voy a vivir durante los próximos años va a ser muy emocionante, lo que quiero es no perder nunca la sensibilidad", explica desde un despacho de la nueva sede que tiene la Asociación en la calle Viaducto Marquina.

Residente en Avilés, aunque pronto se mudará a Gijón, Calero estudió Medicina en Madrid. La doctora pasó un tiempo trabajando en Urgencias, en "las lecheras" antes de especializarse en Medicina del Trabajo. Respecto del equipo de gobierno, cuenta que, aunque tiene una lista de nombres de posibles candidatos, se entrevistará con el actual para saber quienes quieren continuar. "Han hecho un trabajo increíble durante estos últimos años", explica. El listón, dice, está muy alto, pero el objetivo es seguir subiéndolo.