Trece cámaras videovigilarán el casco histórico de Oviedo finalmente. La concejalía de Seguridad Ciudadana anunció este martes su intención de sumar cuatro dispositivos a los nueve inicialmente previstos con el fin de atajar la delincuencia y la proliferación de grafitis en el Antiguo. Así lo anunció el edil José Ramón Prado después de mantener una reunión con colectivos vecinales en la que los representantes ciudadanos instaron al Consistorio a extender la red de control a otros puntos, como la plaza del Fontán o calles como Fuero y Regla. El edil mostró su confianza en que el nuevo sistema de seguridad esté instalado “a finales de febrero”.
La inversión de casi 200.000 euros permitirá dotar al barrio de trece cámaras con alta capacidad de resolución, visión nocturna y protección frente a posibles ataques vandálicos. El Ayuntamiento es cauto a la hora de dar su ubicación concreta, si bien tiene como prioridad dar cobertura a varias de las principales arterias y plazas del casco histórico. Cimadevilla, Carpio, Santa Ana, San José, la Corrada del Obispo, San Vicente, Trascorrales, el eje de Mon o las nocturnamente concurridas plazas de Sol y el Paraguas figuran como “puntos calientes” y preferenciales para la instalación.
Estas propuestas no satisfacen del todo a los vecinos, los cuales temen que el mayor control en unas calles traslade la conflictividad a otras cercanas. “Nos preocupan zonas como la calle Fuero”, explicó Manuel Almeida, presidente de Oviedo Redondo, a la salida de un encuentro al que, además de Prado, también asistió el concejal de Hostelería, Alfredo Quintana, el jefe de la Policía Local, José Manuel López, y el director general de Seguridad Ciudadana, Javier Lozano.
La representación municipal recogió igualmente la petición del representante de la asociación de vecinos del Fontán, Jesús Veiga, de instalar cámaras en los arcos de la emblemática plaza. Por su parte Juan García, miembro de la asociación de vecinos del Antiguo, solicitó que se pueda también controlar el entorno de la calle Regla, donde, aseguró, “existe un problema creciente de prostitución callejera” que, a su juicio, “está aumentando la inseguridad en la zona”.
