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El tesoro de “Piedrina” llega al Arqueológico

La familia del historiador reguerano José Manuel González cede al museo más de 3.000 piezas de su colección particular

Pablo León –a la izquierda–, Carlos García Rodríguez y María Antonia Pedregal en el Arqueológico, ante la exposición dedicada al legado de José Manuel González. | | FERNANDO RODRÍGUEZ

José Manuel González y Fernández Valles (Paladín, Las Regueras; 1906-Oviedo; 1977) solía ilustrar sus clases de Prehistoria en la Universidad de Oviedo con abundante material lítico, razón por la que sus alumnos acabaron refiriéndose a él por el mote de “Piedrina”. El excepcional legado de “Piedrina” está constituido por más de tres mil piezas arqueológicas y un ingente fondo documental, con 850 libros de su biblioteca, fotos, dibujos, planos y mapas y anotaciones, reunidos durante más de cuarenta años de andanzas por Asturias. Sus herederos lo han depositado en el Museo Arqueológico de Asturias, en Oviedo, atendiendo al deseo del erudito, que quería compartir su tesoro con todos los asturianos. Una pequeña muestra de esos fondos permanecerá hasta el 4 de marzo expuesta en la primera planta del antiguo monasterio de San Vicente, donde el museo tiene su sede, y se complementa con una proyección fotográfica, que repasa la vida de José Manuel González.

Publicaciones de José Manuel González en el Ridea. Fernando Rodríguez

Durante la presentación del nuevo depósito, ayer al mediodía, el sobrino nieto de José Manuel González, Carlos García Rodríguez, contó cómo, cuando el arqueólogo falleció, Diógenes García, su padre y cuñado del historiador, mantuvo su despacho, sus libros y todos sus objetos tal y cómo él los había dejado, permitiendo el acceso a todos los estudiosos que lo solicitaban. Al fallecer hace un par de años, sus tres hijos recogieron su testigo y en octubre del año pasado llegaron a un acuerdo de cesión con el Arqueológico, que se compromete a acometer la catalogación, estudio y difusión de la colección.

La directora del museo, María Antonia Pedregal, destacó el “interés histórico, artístico, arqueológico, etnográfico, documental y bibliográfico” del legado de José Manuel González. El de ayer, dijo, ha pasado a ser “un día muy importante para la arqueología asturiana”.

José Manuel González, “Piedrina”.

El estudioso reguerano, que hizo de su concejo su principal objeto de investigación, localizó muchos yacimientos del Paleolítico inferior y medio y entre las piezas que recogió en superficie, en el transcurso de sus largas caminatas, la directora del Arqueológico destacó los grandes bifaces de cuarcita que encontró en Llagú, en Oviedo; en Las Regueras y en Busto, en Luarca; un hacha de la Edad del Bronce de Figares, en Salas; un fragmento del mosaico de la villa romana de Andayón, en Las Regueras, y una muela manuaria decorada que procede del castro de La Picona, del Molino de Ricabo.

En 1917, cuando tenía once años, José Manuel González, encontró en Foxó, en Tameza, un tesorillo de 173 monedas de bronce romanas, la mayor parte con la efigie del emperador Diocleciano. Ese hallazgo excepcional también ha quedado depositado en el Arqueológico.

Fichas escritas a mano por José Manuel González. Fernando Rodríguez

La otra parte del legado de José Manuel González es documental y abarca un periodo de tiempo que transcurre entre 1930 y1977, año de su fallecimiento. Incluye libros, artículos y anotaciones sobre lexicografía, lingüística, historia, prehistoria y arqueología, con 850 volúmenes de su biblioteca personal y 16 cajas con las separatas. María Antonia Pedregal destacó dos colecciones encargadas por el propio investigador, con toda su obra dispersa ordenada en cinco volúmenes, además de fichas, cuadernos y carpetas sobre los yacimientos y los materiales que localizó y sobre su metodología de trabajo para descubrir dólmenes, túmulos –más de 600 del periodo megalítico– y castros. Fotografías y cámaras de fotos, planos y mapas que utilizaba para orientarse en sus excursiones, dibujos con los que ilustraba sus publicaciones e incluso un autorretrato juvenil han pasado a manos del museo. Más adelante, en una futura exposición, está previsto recrear su despacho, con sus muebles, que también han sido cedidos al Arqueológico.

La directora del museo se refirió a José Manuel González como a un hombre “discreto, tímido, de reducida vida social y con un método de trabajo meticuloso y constante”. Recordó que fue miembro del Real Instituto de Estudios Asturianos (Ridea) y de la Real Academia de Historia, y autor del primer gran mapa arqueológico de Asturias.

Muela del Molino de Ricabo. Fernando Rodríguez

El director general de Patrimonio Cultural del Principado, Pablo León, prometió, en nombre de la Consejería de Cultura, “cuidar” e impulsar el estudios del legado de José Manuel González, “un referente de la arqueología en Asturias”, esforzándose “en estar a la altura de su sensibilidad” y corresponder con “su trabajo apasionado”. “Este importantísimo legado llega al lugar adecuado”, aseguró, dirigiéndose a la familia. A la presentación del depósito y la inauguración de la exposición asistieron la alcaldesa de Las Regueras, Maribel Méndez, y su concejal de Cultura, Vicente Hérranz. También el arqueólogo y ex director de Patrimonio Cultural del Principado Adolfo Rodríguez Asensio.

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