Una fusión del potente sabor del afuega’l pitu, las manzanas verdes y el caramelo hace salivar en una terraza junto a la plaza Trascorrales a toda una familia. “Además de ricos, estos pinchos son originales”, explica Mayli Fernández, una amante del picoteo que ayer salió a la calle junto a su marido Luis Álvarez y sus dos pequeños, Óscar y Mayli, para disfrutar del certamen de tapas y pinchos “Bocados del Cofrade” con el que la patronal hostelera Otea pone el toque gastronómico a la Semana Santa en 24 establecimientos.
El día soleado y las ganas de disfrutar del Sábado Santo tras dos años de restricciones sanitarias empujaron a muchos ovetenses y visitantes a hacerse con los grastromapas y hacer varias paradas por sus bares de cabecera. “Vimos que tenía buena pinta y probamos”, indican Luis Álvarez y Belén Fanjul justo antes de hincar el diente al “Bacalao de Cuaresma” la tapa con la que una pulpería del Fontán tratará de optar a los capuchones de oro, plata y bronce, con los que los comensales premiarán a través de una votación a los mejores pinchos del certamen.
Unos metros más allá, en otro restaurante de la misma plaza del Fontán, varios clientes reclaman a pie de barra unos “Capirotes crujientes de bacalao”, un pincho con el que esta variedad de pescado se consolida como la reina en época de cuaresma y que en la jornada de ayer atrajo a numeroso público ambiente de sus toques salados. “Soy un fan del bacalao y aquí siempre lo preparan bien sea cual sea la receta”, sostiene Pepe Álvarez, un habitual de los largos vermús de este local del casco histórico ovetense
Quienes quieran paladear los mejores sabores de temporada a través de esta iniciativa de Otea podrán hacerlo todavía hoy tanto en los 24 locales participantes en “Bocados del Cofrade” como en los ocho restaurantes que ofrecen menús temáticos con precios variables, que están teniendo buena acogida entre los turistas. “Se nota que aquí en Asturias hay buena cocina y que se esmeran mucho en dar a conocer su tradición”, apunta el salmantino Carlos Blázquez, que estos días se encuentra en la ciudad acompañando a uno de sus hijos en la disputa de la Oviedo Cup. “Es posible que repitamos, sobre todo por la comida”, sostiene el charro, encantando con la “mezcla de cultura y buen comer” de la capital del Principado.
