Oviedo aspira a que su vuelta con pabellón propio en la Feria de Muestras 17 años después sea “sostenible en el tiempo” y por ello el Ayuntamiento confía en firmar en las próximas semanas un acuerdo con la Cámara de Comercio de Gijón, que garantice una presencia “digna” y “viable económicamente” de la capital asturiana en la gran cita comercial. El Consistorio confirma la noticia adelantada por LA NUEVA ESPAÑA sobre un preacuerdo para levantar un espacio propio en la zona institucional situado entre los pabellones del Principado y el Banco Sabadell-Herrero, aunque advierte de que el acuerdo está pendiente de algunos flecos económicos.
El concejal de Turismo, Alfredo García Quintana, admite el especial interés del Ayuntamiento por estar presente en una cita que en la última edición previa a la pandemia recibió más de 720.000 visitantes. Oviedo quiere aprovechar la edición de este año, prevista del 6 al 22 de agosto, ya con condiciones al margen de la pandemia, para volver por la puerta grande mediante un recinto propio en el que desarrollar su propio programa promocional de los atractivos de la ciudad.
Tanto el Ayuntamiento como Cámara de Comercio están de acuerdo en la ubicación del pabellón de nueva construcción, y aunque fuentes del colectivo empresarial fijan el inicio de los trabajos para dentro de unas semanas, el equipo de gobierno municipal prefiere ser mucho más cauteloso. “Sería muy aventurado y atrevido hablar de un acuerdo que todavía no existe”, indica Quintana, especialmente prudente ante la posibilidad de que en caso de falta de acuerdo económico las negociaciones “puedan dar un giro”.
Las claves
- Pabellón propio. Oviedo planea volver este año a la Feria de Muestras con un nuevo pabellón propio, que se construirá entre los del Banco Sabadell y el Principado en la zona institucional y con superficie suficiente como para acoger una amplia programación con la ciudad como gran protagonista.
- Negociaciones. Aunque la Cámara de Gijón ya da por hecha la vuelta del Ayuntamiento, este subraya que están aún pendientes de cerrar el acuerdo económico para ejecutar el proyecto.
Con todo, el concejal se muestra optimista y cree que, “en cuestión de semanas”, el acuerdo entre las partes pueda ser firmado y su área pueda ponerse ya manos a la obra en el diseño de un pabellón con el que aspiran a impresionar a los visitantes y seguir consolidando la imagen de Oviedo como referente turístico, cultural y económico del Principado de Asturias.
La vuelta de Oviedo con espacio propio a la Feria es también muy ansiada por los organizadores. La ciudad contó hasta 2005 con un pabellón independiente, donde se convirtieron en un clásico del verano las grandes celebraciones en su espacio hostelero. Fue entonces cuando la ampliación del pabellón central de la Feria se comió el recinto ovetense y el entonces gobierno de Gabino De Lorenzo renunció a seguir acudiendo al evento por no disponer de un espacio lo suficientemente adecuado para representar a la ciudad.
La situación cambió en 2016 cuando el gobierno tripartito (PSOE, Somos e IU), dirigido por el socialista Wenceslao López, retomó la participación de Oviedo en la Feria con actos puntuales en los espacios de la Cámara de Comercio en el Palacio de Congresos del recinto. En 2017, el entonces edil de Economía, Rubén Rosón, impulsó la contratación de un stand municipal propio, “Uviéu Embruxa” en el pabellón 3 del recinto Luis Adaro cuyo diseño y coste provocó fuertes críticas de la oposición, que incluso llevó el caso a los tribunales, que no apreciaron irregularidades. La experiencia se repitió en 2018, con el proyecto “Oviedo, cruce de caminos”.
Con el cambio de gobierno local en 2019, el equipo de Alfredo Canteli renunció a contar con stand propio con las condiciones que habían dejado sus antecesores y limitaron su participación en la feria a actos puntuales. En 2020 todo se fue al traste con la pandemia y en 2021 el Consistorio tampoco se animó a apostar por una edición condicionada todavía por el covid.
No obstante, el propio Canteli mostró su disposición a volver con espacio propio en 2022. Un objetivo que ahora parece más cerca que nunca, a falta de certificar un acuerdo que las dos partes verían con muy buenos ojos. El Ayuntamiento volvería a tener un espacio de referencia en una cita de gran repercusión nacional e internacional, y la Cámara de Comercio recuperaría uno de los grandes expositores de la región con la novedad como principal baza para tratar de atraer a miles de visitantes adicionales en una edición que se espera especialmente concurrida tras los dos duros años de pandemia.
