La Delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, definió ayer el suceso de La Florida, el tiroteo en el que se vieron envueltos un grupo de agentes de paisano y dos estudiantes de medicina de 19 y 20 años, como un "incidente" que ha sido "bastante desgraciado". Losa, en todo caso, señaló que los agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad deben actuar "con las máximas cautelas" y que "el uso de un arma de fuego tiene que ser la última medida porque es un peligro y puede causar un daño irreparable". Delia Losa hizo estas declaraciones ayer, en la inauguración de las jornadas de puertas abiertas de la Delegación del Gobierno en Asturias. Losa, que es también Secretaria General de la Agrupación Municipal Socialista de Oviedo (AMSO-PSOE), señaló que "no hay novedad" en las investigaciones en torno al caso, aunque mostró su confianza en que el proceso "se resuelva pronto".

El tiroteo se produjo en San Lázaro de Paniceres el pasado 24 de junio. Los dos jóvenes, que estaban en el interior de un coche, fueron requeridos a mostrar su identificación por agentes de paisano que efectuaban un control en la zona. Según la versión de los jóvenes, en un primer momento creyeron que eran un grupo de ladrones, por lo que trataron de escapar en coche. Según los agentes, al iniciar la huida el vehículo pasó por encima de un pie del agente, que quedó herido, y estuvo a punto de arrollar a otro. Esto habría causado, según el relato de los agentes, que el que se encontraba herido desenfundase su arma y, ante el temor por la seguridad de su compañero, desenfundase su arma y efectuase tres disparos "intimidatorios" dirigidos a las ruedas del coche. Los disparos impactaron en la luna de una ventanilla, en una aleta y en la puerta del conductor. El vehículo en el que iban los jóvenes fue interceptado 800 metros después, y el conductor pasó la noche en el calabozo. El asunto está en los juzgados, ya que hay dos denuncias cruzadas: los agentes acusan al conductor del vehículo de atentado a la autoridad, mientras la familia del joven sostienen que puede ser un caso de homicidio en grado de tentativa. Losa aseguró que aboga por un uso controlado de las armas, especialmente si los agentes van sin uniformar, y confía en que el caso "se resuelva pronto".