Un día antes de que finalice –hoy– el plazo máximo para presentar alegaciones al proyecto de Ronda Norte que ha sacado a información pública el Ministerio de Transporte, el Ayuntamiento de Oviedo ha finalizado sus alegaciones. Tal y como había adelantado el alcalde, Alfredo Canteli, el Ayuntamiento defiende que se haga un único túnel donde antes había dos, soterrando también el tramo de la pista finlandesa, pero reclama, además, que se entierre además la vía en otro punto, a la altura de La Lloral, para proteger el Camino de Santiago y el bosque de Monte Alto. En la práctica, con la petición de que se sotierre el enlace de La Florida, lo que se plantea es casi un único túnel de 5 kilómetros.
En términos generales, el Ayuntamiento reclama más cuidado al Ministerio ante el impacto ambiental, recalca que no se ha estudiado la afección que puede tener sobre los monumentos prerrománicos e insiste en la inestabilidad de los terrenos y la necesidad de hacer estudios geotécnicos para garantizar la estabilidad de las soluciones que se proponen. Además, se pide reducir enlaces o, como solución intermedia, semienterrarlos, como plantea con las conexiones en La Florida.
Las alegaciones defienden, en todo caso, que el proyecto es «interesante para la movilidad urbana interior, pudiendo producir apreciables disminuciones del tráfico en la ronda interior y por tanto, una mejora en la calidad de vida de estas zonas densamente pobladas» y considera idóneo el trazado número 4 por el que se decanta el ministerio, el que llega hasta la Corredoria.
Afea, en cambio, el tipo de vía, que considera demasiado grande para las necesidades. «Los parámetros de diseño seleccionados en cuanto a la velocidad de proyecto y prognosis de tráfico pueden resultar un tanto excesivos», dicen las alegaciones, «pues prácticamente se viene a considerar que la nueva infraestructura captaría la totalidad del tráfico que en la actualidad discurre por la AS II».
«Soterrar es una solución menos lesiva para nuestro querido Naranco», dice Nacho Cuesta
También llama la atención por el «impacto importante en cuanto afecciones al suelo y movimientos de tierras». «Estos impactos se aprecian de forma especial en los enlaces de la Florida y Ciudad Naranco, por su proximidad a los barrios residenciales de La Florida y Prados de la Fuente, afecciones al suelo no urbanizable de Especial Protección del Monte Naranco y a la Pista Finlandesa», explica. Insiste en que «no se ha dado tratamiento específico suficiente a la presencia de los monumentos prerrománicos de Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo» y destaca que «sería necesario realizar un análisis más exhaustivo de los riesgos que la construcción de un túnel podría suponer en las proximidades de los citados monumentos y en menor medida en alguna otra infraestructura básica de la ciudad». «Sin pretender en modo alguno parecer alarmistas», llega a decir el Ayuntamiento, «no podemos olvidar que nos encontramos en una zona de margas, arcillas y areniscas del terciario, que han dado no pocos problemas de estabilidad en los taludes de la AS-II y del ferrocarril en la zona de La Corredoria, por lo que la construcción de esos túneles requerirá de las mejoras técnicas constructivas especialmente, porque la montera se prevé estricta en determinadas zonas».
Metidos en el detalle de las reclamaciones concretas que se hacen al ministerio para mejorar el trazado, se pide, en primer lugar la eliminación del enlace de la Prados de la Vega y la ejecución, con esta supresión, de un túnel único entre el parque de Pura Tomás y el emboquille de Fitoria.
Argumenta el Ayuntamiento que desde un punto funcional hay poca distancia entre Luis Oliver y este enlace como para justificar esta conexión y, en cambio, su eliminación «permitirá preservar el conjunto paisajístico de los alrededores de la pista finlandesa, muy querido por los ciudadanos de Oviedo, evitando la realización de un tramo de la infraestructura a cielo abierto de unos 600 m, y eliminando a su vez dos emboquilles cuyas características son muy agresivas para esta zona de la ciudad».
Pero este único túnel de 3 kilómetros que propone el Ayuntamiento no se queda aquí. En el segundo punto se pide eliminar el tramo a cielo abierto entre el enlace de La Lloral y el enlace de Las Campas. Lo que se propone es semienterrar la conexión de la Ronda Norte con las Campas, que es el punto en que comenzaría el túnel, y a partir de ese punto, en dirección oeste, prolongar la zona soterrada hasta La Lloral. «Vista la imposibilidad de no afectar al Camino de Santiago y también la necesidad de preservar el Monte Alto y el arroyo de Ules se considera necesario enterrar este tramo de la infraestructura ejecutando un túnel (túnel de la Lloral). El resultado es, en la práctica, prolongar el trazado soterrado de la Ronda Norte hasta los 5 kilómetros.
El concejal Nacho Cuesta, encargado de presentar las alegaciones en tanto que ejerce estos días como alcalde en funciones, explicó ayer que la Ronda Norte es una infraestructura «imprescindible para la ciudad, como siempre ha defendido este equipo de gobierno», pero que hay que buscar «una solución menos agresiva y lesiva con nuestro querido Monte Naranco, y esta solo puede pasar por la ejecución de un túnel único».
«La opción que proponemos», detalló el edil, «con base en exhaustivos análisis técnicos, es un túnel de aproximadamente cinco kilómetros, con entrada a la altura de la tejera de la AS II y salida en La Lloral, San Claudio, de esta manera se conseguirían preservar más de 1.200 metros cuadrados de espacios naturales de gran valor paisajístico entre La Lloral y Las Campas. Con respecto al enlace en Ciudad Naranco, nos parece prescindible y su eliminación permitiría entre otras ventajas, conservar el conjunto paisajístico de los alrededores de la pista finlandesa».
