La Fiscalía Superior de Asturias mantiene abiertas unas diligencias de investigación por un presunto delito de prevaricación administrativa en la contratación de vehículos policiales supuestamente cometido por un empleado del Ayuntamiento de Oviedo, en concreto un agente de la Policía Local que actualmente se encuentra en excedencia. Los hechos se habrían cometido durante el mandato del anterior gobierno municipal.
Según consta en el atestado municipal remitido a la Fiscalía, y que dio lugar a las diligencias de investigación que lleva a cabo la fiscal de delitos contra la Administración Pública, el agente, destinado en el servicio de la grúa, habría elaborado un pliego de prescripciones que se amoldaban a una determinada marca de vehículos, que fue la adjudicataria del servicio. En abril de 2021, una vez que se sirvieron los vehículos, pidió el alta voluntaria y empezó a trabajar de comercial en la empresa adjudicataria. En el verano de 2021, acudieron a la Comisaría de Policía Local agentes del cuerpo municipal de Guecho, en Vizcaya, quienes habrían sido contactados por el citado agente a través de correos electrónicos, ofertando contratos similares. El agente ha pedido su reincorporación recientemente.
Según el atestado, en la memoria justificativa del contrato de arrendamiento de 32 vehículos con destino al área de Seguridad Ciudadana del servicio de Policía Local, figuran la firma del propio agente, la del entonces comisario jefe, Luis Manuel García, y la del concejal de Seguridad, Ricardo Fernández. El agente investigado fue nombrado responsable del contrato y elaboró el pliego de prescripciones técnicas. El atestado resalta la «falta de motivación en las medidas» propuestas por el agente. Y añade que, «supuestamente, de forma velada, quien elaboró y redactó el pliego de prescripciones técnicas limitó la concurrencia a una única marca».
El atestado determina «la ausencia de conocimiento en la materia dentro del marco educativo general» por parte del agente investigado, así como la «ausencia de cualificación profesional dentro del programa municipal». El atestado concluye que «falta cualificación para la elaboración y redacción de unos pliegos de características técnicas».
«Ajena al proceso»
Requerida la empresa que sirvió los vehículos y se encarga de su mantenimiento, ésta rechazó cualquier participación en la elaboración del pliego de prescripciones técnicas, y se dijo «ajena al proceso concursal». La empresa indicó además que las medidas y características establecidas en el pliego de condiciones no eran exclusivas de su marca, sino compartidas por otras que podrían haber optado al contrato.
En el atestado se señala que al agente se le abrió expediente por haber sido nombrado concejal en otro concejo, algo que prohibe el reglamento de la Policía de Oviedo. No fue sancionado.
La diligencia de conclusión del atestado, extendida el pasado 11 de mayo, establece que el agente «elaboró y redactó el pliego de prescripciones técnicas a pesar de su supuesta falta de cualificación». Añade que «queda acreditado que ha realizado determinadas maniobras tendentes a limitar la libre concurrencia, mediante la elaboración del pliego de prescripciones técnicas de determinadas medidas y características de los vehículos», de forma que «únicamente podía competir un solo licitador».
Concluye además que «no puede descartarse la participación de otras personas sin que este extremo haya podido confirmarse». Finaliza indicando que «los hechos pudieran incardinarse, supuestamente, dentro de los delitos de tráfico de influencias, prevaricación, malversación y cohecho». La investigación de la Fiscalía Superior sigue su curso.