La carrera de Papá Noel desborda Uría y llena las calles de Oviedo de espíritu navideño

En la resaca del derbi, una marea rojiblanca inundó ayer por la mañana el centro de Oviedo. No tenía nada que ver con el fútbol pero sí con el deporte. La primera carrera de Papá Noel del norte de España, una iniciativa que Total Energies ya desarrollaba en Madrid, llegó ayer por primera vez a la ciudad y desbordó todas las previsiones. Más de 2.500 participantes, el número de inscritos que habían agotado los dorsales hace ya días, corrieron por el entorno de la calle Uría y hasta la Losa los más esforzados, en las modalidades de 2 y 4 kilómetros y llenaron el centro de la ciudad y el Campo San Francisco de un ambiente festivo y familiar al que ayudó el buen tiempo.

Más allá de lo deportivo, con buenos tiempos como los de Diego Velasco (9,18 minutos) y Patricia Fernández (9,49) en la prueba de 4 kilómetros, la prueba fue una fiesta navideña adelantada, donde todos los corredores fueron vestidos de Papá Noel o de elfos y redondearon sus disfraces con todo tipo de complementos. Así sucedió con la ganadora a la mejor Mamá Noel, Gabriela Aldaz, que con cartón, y fieltro convirtió la silla de su pequeña Ezra, de cuatro meses, en un impresionante trineo. Abundaron no solo las familias, también las mascotas y un montón de perros convertidos en insólitos «Santa Guaus». Era el caso de Miguel Arganza y Ana Riaño, que corrieron con su hija Carlota, de diez años, y con «Cody».

La cita fue ocasión, también, para la reunión de grupos de amigos, algunos tan numerosos como el del colegio de los Dominicos, que logró, con su empeño y una enorme participación, el galardón en esta categoría. Otros grupos de amigas, como Sofía Sánchez, de 77 años, y su hija Ana Pérez, de 52, se sumaron a las compañeras de zumba, «Las zumbadas», para alanzarse a correr por Uría y alrededores.

Desde el Ayuntamiento y Total Energies aplaudieron el éxito de esta convocatoria y confirmaron que la carrera de los Papás Noeles ha venido para quedarse, con posibilidad de incrementar el número de dorsales para el año que viene. La concejala Conchita Méndez dio por inaugurado el espíritu navideño con la competición y Javier Sáenz de Jubera, presidente de Total, celebró el desarrollo de la carrera: «Es una fiesta, de niños, de familias, de todos, esto va a durar muchos años», auguró.