Luis Germán Avilés: "Estar en Oviedo y no vivir su Semana Santa es casi imperdonable"

Dos vivas, uno a Oviedo y otro a su Semana Santa, dieron paso una larga y sonora ovación para el pausado y apasionado pregón pascual ofrecido en la iglesia de San Tirso el Real por el coronel y jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Oviedo, Luis Germán Avilés. "Estar en Oviedo y no vivir su Semana Santa es casi imperdonable, y estar fuera y venir a vivirla es mucho más que razonable", declaró el mando de la Benemérita ante los bancos ocupados por numerosas autoridades políticas y civiles, cofrades y familiares.

El coronel Avilés ofreció un discurso de un cuarto de hora con la intención de transmitir y hacer entendibles las bondades de la Pascua en general y la Semana Santa ovetense en particular. "Este tiempo es un oasis para el alma y el cuerpo, para reposar y reflexionar", contrapuso, respecto a una sociedad actual en la que, parafraseando a sus paisanos extremeños, lamentó que "no hay tiempo pa casi ná".

El guardia civil se refirió a la Semana Santa como "un nexo de unión de los pueblos de España" y calificó de "única" la Pascua ovetense, atribuyendo dicha singularidad al "gran trabajo realizado durante todo el año por cofrades mayores, pequeños y medianos". Con la intención de no olvidar a nadie, enumeró a todas las cofradías ovetenses (La Borriquilla, el Nazareno, el Cautivo, el Santo Entierro, la del Silencio, los Estudiantes y la Resurrección), además de citar a todas sus imágenes, las cuales calificó como "joyas y obras de arte engalanadas".

El pregonero comenzó su intervención describiendo, con grandes artes literarias, su estreno en el mundo cofrade. Recordó cómo, cogido de la mano de su madre, asistió a un acto con gran afluencia de gente en la que muchos vestían de negro y dejaban entrever en su rostro una mezcla de emoción y alegría al acompañar con la mirada el desfile de una imagen no muy bien tallada. "Esa escena imborrable la rememoro cada año aquí, en Oviedo", afirmó desde una mesa en la que estuvo acompañado por el presidente de la Junta de Hermandades, Luis García Pevida, y el hermano mayor de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Oviedo, el doctor José Ángel Rodríguez Getino, quién se encargó de glosar al protagonista.

Getino hizo un repaso por la trayectoria vital de Avilés. Además de recordar sus orígenes cacereños, recordó que ingresó en el cuerpo de la Guardia Civil en 1995 y durante muchos años estuvo muy vinculado a la docencia, además de participar en muchos proyectos de seguridad de la Unión Europea, antes de ser nombrado en 2014 jefe de la Comandancia de Oviedo, donde desde su llegada se implicó con la Semana Santa. "Siempre la vivió con sentimiento", destacó, recordando que entre las muchas facetas del pregonero se encontraba la de haber participado como escolta de las imágenes de numerosas procesiones.

Avilés agradeció las palabras de su presentador, y al final de su intervención trató de presentarse como un habitante más del Principado. "Soy español, extremeño y, si me lo permiten, un asturiano del sur", comentó, logrando arrancar muchas sonrisas entre el público que, al final del acto, pudo disfrutar de un pequeño concierto de la Asociación Cultural La Castalia.

Entre los asistentes se encontraron la delegada del Gobierno, Delia Losa, a la cabeza de una representación política liderada a nivel municipal por el teniente de alcalde Mario Arias y varios representantes del Gobierno. Por el PSOE acudió también el candidato a la Alcaldía y otrora pregonero pascual, Carlos Fernández Llaneza, así como la concejala de Vox, Cristina Coto.

En primera fila pudo verse también junto a Losa y Arias al presidente del TSJA, Jesús María Chamorro, y a la fiscal superior de Asturias, María Esther Fernández. Tras ellos, el delegado de Defensa, Juan Luis González; el jefe del Regimiento "Príncipe", Pedro Luis Alcalá; el jefe superior de la Policía Nacional de Asturias, Luis Carlos Espino, y el presidente de la Audiencia Provincial, José Antonio Soto-Jove.

Asimismo, estuvieron entre el público numerosos representantes de las hermandades y cofradías ovetenses, inmersas todas ellas ya en los preparativos y ensayos de una programación cuya primera gran procesión tendrá lugar el 2 de abril, Domingo de Ramos, con salida y llegada desde la iglesia de San Pedro de los Arcos, que comenzará a las 11.00 horas, bajo la organización de la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén "La Borriquilla".

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