El mejor postre para el Desarme: Amelia Valcárcel, la Policía Nacional y el cantante Javier Ojeda, nuevos cofrades de honor

La gala acabó con un desfile por las calles de Oviedo

No hay mejor manera de digerir un suculento atracón que poner sobre la mesa el mejor postre. El Auditorio Príncipe Felipe acogió ayer el acto central del XII Gran Capítulo de la Cofradía del Desarme, uno de los últimos platos de unas jornadas gastronómicas que finalizarán hoy después de diez días en los que el menú tradicional ovetense volvió a ser protagonista en los restaurantes de la ciudad.

Como broche final a la semana de los premios "Princesa de Asturias", durante la ceremonia de ayer también se nombraron los cofrades de honor, que este año son la filósofa y escritora Amelia Valcárcel; el cantante Javier Ojeda, alma de "Danza Invisible"; y la Policía Nacional, que cumple dos siglos de historia. La gala del buen yantar concluyó con un desfile de todas las cofradías invitadas –35 en total– desde el Auditorio hasta el edificio histórico de la Universidad. "Un año más el Desarme ha sido un éxito rotundo. Os animo a trabajar para que esta cita siga creciendo y sea declarada por fin Fiesta de Interés Turístico Nacional", dijo el alcalde de la ciudad, Alfredo Canteli, durante su intervención.

El encargado de abrir el acto fue el gaitero Vicente Prado, el Pravianu, que interpretó el himno del Desarme ante un patio de butacas plagado de asistentes. Después le tocó el turno al cofrade mayor, Miguel Ángel de Dios, que destacó la importancia de una edición que coincide con el año en el que Oviedo ostenta el título de Capital Española de la Gastronomía. "Este tipo de actividades generan actividad económica y facilitan que crezca el turismo", dijo antes de la ceremonia de entrega de la cuchara a los 31 nuevos cofrades que se incorporaron al colectivo. Entre ellos está el presidente del PP en Asturias, Álvaro Queipo.

Uno de los momentos más emotivos del acto llegó cuando Miguel Ángel de Dios recordó la figura de Adolfo Casaprima, recientemente fallecido, Cofrade de Honor del Desarme. Su hijo, Mateo Casaprima, que ayer también se puso por primera vez la chaquetilla de la cofradía, recibió una placa como homenaje póstumo a su padre. Casaprima fue uno de los impulsores del Certamen Internacional de Poesía "El Desarme en verso", en el que este año tomaron parte más de 140 personas de 8 países diferentes. El ganador de esta edición fue el madrileño Alberto Luis Collantes Núñez, que ayer recogió el premio durante la gala y leyó algunos versos de su poema "Contra el hambre y la guerra, la comida", la obra que le hizo llevarse el título.

Amelia Valcárcel dio las gracias a los egipcios durante su discurso tras recibir el título de Cofrade de Honor. "Sin Egipto no habría garbanzos", dijo haciendo historia de uno de los ingredientes estrella del menú del Desarme. "Lo único que nunca entendí de Antonio Machado fue que hablase mal de los garbanzos", remató Valcárcel consiguiendo las carcajadas del público. Javier Ojeda, también muy entregado, se arrancó con "Sabor de amor", una canción muy apropiada para la ocasión que entonó a coro con todo el patio de butacas. El encargado de recoger el galardón otorgado a la Policía Nacional fue Miguel Ángel Ramos, jefe regional de Operaciones. "Para nuestro cuerpo es muy importante sentir el afecto de la gente", agradeció.

Durante la gala también se entregaron las "Cucharas Amigas" al Ayuntamiento de Guijuelo, a la Orden Serenísimo Albariño de Cambados y a José Manuel Martínez García Lobato, del restaurante Casa Lobato. Los Embajadores de Honor de este año son la Asociación Profesional de Fotoperiodistas Asturianos, el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) y la Fundación Caja Rural de Asturias. Al acto asistieron, entre otros, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Asturias, Jesús Chamorro; la viceconsejera de Turismo, Lara Martínez; el presidente de la Cámara de Comercio, Carlos Paniceres, y los concejales de todos los grupos del Ayuntamiento.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents