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Ugo Camera
Ver galería >Jeroglíficos, columnas y pirámides. Un desierto. En el centro, un río. Cualquiera hubiera dicho que su nombre fuese Nilo, pero ayer, en el teatro Campoamor, tuvo otro y con mayúsculas: moda. La Pasarela Campoamor inundó en la tarde-noche el icónico coliseo ovetense de patrones; y partió, como Moisés el mar Rojo, el patio de butacas con el "catwalk" de las más de veinte modelos que ayer desfilaron entre los asientos. La VII edición del evento de moda hizo reventar de público el teatro y discurrió amenamente entre los desfiles de Dolores Cortés, Quetzal, Arturo Obegero y Fely Campo, y actuaciones, además de dejar un guiño a la reciente declaración de Patrimonio Cultural Inmaterial a la ‘Cultura sidrera asturiana’ con un himno de Asturias tocado al arpa por la artista paraguaya Noelia Sanabria.
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Jeroglíficos, columnas y pirámides. Un desierto. En el centro, un río. Cualquiera hubiera dicho que su nombre fuese Nilo, pero ayer, en el teatro Campoamor, tuvo otro y con mayúsculas: moda. La Pasarela Campoamor inundó en la tarde-noche el icónico coliseo ovetense de patrones; y partió, como Moisés el mar Rojo, el patio de butacas con el "catwalk" de las más de veinte modelos que ayer desfilaron entre los asientos. La VII edición del evento de moda hizo reventar de público el teatro y discurrió amenamente entre los desfiles de Dolores Cortés, Quetzal, Arturo Obegero y Fely Campo, y actuaciones, además de dejar un guiño a la reciente declaración de Patrimonio Cultural Inmaterial a la ‘Cultura sidrera asturiana’ con un himno de Asturias tocado al arpa por la artista paraguaya Noelia Sanabria.
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