La cirugía y el glamour de la Edad Media toman el Naranco

Pinzas para evitar desangramientos. Tenazas para sacar dientes o muelas. Fórceps, tijeras, escalpelos… Todo un pequeño arsenal de instrumentos de quirófano, “no muy distintos de los actuales”, que se empleaban hace 12 siglos. “La medicina estaba bastante avanzada y la mortalidad era menor de lo que podría pensarse”, explica a los niños uno de los miembros del Campamento Altomedieval que este puente festivo ha estado instalado en el Centro de Interpretación del Prerrománico del monte Naranco (Oviedo).

El entorno histórico del monte ovetense ha retornado a la Alta Edad Media por unos días con una recreación histórica que incluye museo viviente, charlas y demostraciones en vivo sobre distintos aspectos de la vida civil y militar en el Reino de Asturias.

“¿Qué tipo de tejidos emplearían en el siglo IX?”, pregunta uno de los habitantes del campamento. Una niña de muy corta edad responde con una llamativa precocidad: “Lino, seda, algodón, lana…”. No ha acertado del todo, pero manifiesta un interés muy singular. El ponente explica: “La indumentaria en la Asturias medieval era similar a la del resto de la Europa cristiana, sobre todo del imperio Carolingio. El uso de algodón entre los cristianos llegó de forma tardía. La seda se fue haciendo más accesible. A menudo vestían una capa interior de lino. La mayor distinción social la proporcionaban los tintes de colores intensos”.

La actividad didáctica corre a cargo del Grupo de Recreación La Guardia. Escuchan las explicaciones adultos y un buen puñado de niños. Se habla de la moda medieval; de la higiene, la belleza y la salud; del trabajo del cuero; de la vida militar en el Reino de Asturias. “La novedad de esta edición ha sido la inclusión del mundo andalusí”, señala Clara García, una de las responsables del Centro de Interpretación del Prerrománico.

¿Qué distinguía a los andalusíes en su manera de vestir? Responde el ponente: “Entre otras cosas, el algodón traído de Egipto, que era un material de lujo. Entre las clases altas se importan modas de Damasco. La moda andalusí es bastante unisex, con la excepción de los velos. Tanto hombres como mujeres usan pantalones”.

Unos metros más arriba, los turistas visitan Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo. Unos son familias que han viajado a la capital del Principado con motivo de la Oviedo Cup; otros son visitantes más centrados en el patrimonio histórico y cultural. En las conversaciones telefónicas pilladas al vuelo se cuentan las experiencias gastronómicas. Y en el complejo arquitectónico del Naranco se sigue echando en falta una mayor pedagogía sobre el uso de los coches y sobre la necesidad de usar el parking situado a media subida, aunque suponga una caminata cuesta arriba de unos pocos centenares de metros.