Los usuarios denuncian deficiencias en la piscina de verano de San Lázaro

Los bañistas le piden al Ayuntamiento accesos adaptados y que acabe con las pintadas

Pintadas en una de las paredes del edificio de la piscina.  | LNE

Pintadas en una de las paredes del edificio de la piscina. | LNE

Félix Vallina

Félix Vallina

Oviedo

En la cola para entrar a disfrutar de las piscinas de verano de San Lázaro varios usuarios se acercan para denunciar el mal estado de las instalaciones y para pedirle al Ayuntamiento que actúe cuanto antes para darle un lavado de cara a una de las piscinas municipales con más bañistas. "Llevan años sin hacer nada y cada año está peor. Si no se ataja el problema van a acabar por tener que cerrarlas", señala María José Alonso, asidua siempre que el tiempo lo permite.

Una vez en el interior del complejo, las críticas van en aumento. Para empezar, los bañistas señalan que las paredes están llenas de pintadas y que la zona de las duchas que hay a la entrada del vaso –que tienen una pileta para lavarse los pies por motivos de higiene– tienen las baldosas desgastadas y "en muy mal estado", lo que supone "un peligro" para las personas. "Acabo de ver a un niño resbalar y pegarse un buen golpe en la cabeza. Cualquier día ocurre una desgracia", sostiene Raquel Fernández, otra bañista habitual de las piscinas de verano de San Lázaro.

Las quejas van más allá. Los usuarios denuncian que la zona de césped no está cuidada como debería y que no hay accesos para personas con movilidad reducida. Por otro lado, critican que los toboganes para los niños sigan sin arreglar, el "mal estado" de los vestuarios –una de las denunciantes muestra una fotografía en su móvil en la que se aprecia que falta una puerta en la zona de los baños– o que no funcione el servicio de guardarropa. n

Tracking Pixel Contents