El crimen de La Corredoria: el "Viejo Leo" le dijo a una amiga que quería irse de la casa en la que vivía con su supuesto asesino

El abogado de la acusación llamará a declarar a una testigo que afirma haber escuchado al fallecido decir que había tenido "encontronazos" con "Oscarín"

Familiares del "Viejo Leo" con una fotografía del fallecido.

Familiares del "Viejo Leo" con una fotografía del fallecido. / F. V.

La Corredoria

Leónidas Laborde quería dejar su trabajo y marcharse del piso de La Corredoria en el que vivía interno para cuidar del hombre que está acusado de haberle matado. El abogado de la familia del "Viejo Leo" –así era conocido cariñosamente el fallecido– tiene previsto llamar a declarar a una testigo que afirma haberle escuchado decir más de una vez que había tenido "varios encontronazos" con Óscar Sánchez y que el sueldo que recibía por hacerse cargo de él no le parecía suficiente. Según explica el letrado de la acusación, Leónidas Laborde cobraba 600 euros al mes por cuidar de "Oscarín", diagnosticado de esquizofrenia y con una discapacidad del 65 por ciento. "Recibía 300 más, pero era para comprar comida y cosas para la casa", asegura el abogado Fernando Barutell. "Esta mujer, que era amiga personal de Leónidas, cuenta que estaba harto de vivir en esa casa y que quería marcharse, así que su testimonio va a ser importante y puede arrojar luz sobre lo que ocurrió", añade el letrado.

La familia de Oscar Sánchez y el abogado que lo defiende mantienen que la relación entre el acusado y el "Viejo Leo" siempre fue buena y que "Oscarín" no pudo matarle porque "lo quería como a un padre", aunque el día anterior a la aparición del cadáver, el pasado 19 de diciembre, ambos tuvieron una discusión en un bar de La Corredoria. Una de las trabajadoras del local, que ya declaró como testigo, le contó a la magistrada que instruye el caso que el "Viejo Leo" había estado jugando a la máquina tragaperras durante varias horas y que, sobre las cinco de la tarde, llegó al local "Oscarín", que se sentó al otro extremo de la barra del negocio. La mujer explicó que en un momento dado, el presunto homicida se acercó a su cuidador y le pidió sin éxito que se fuesen a casa. Luego le lanzó un reproche en voz alta: "Solo juegas a las máquinas y no me has dado la comida. A ver si tengo suerte y me das la cena".

El portal en el que vivía el fallecido con el sospechoso de haberle matado. En el recuadro, el «Viejo Leo».

El portal en el que vivía el fallecido. En el recuadro, el "Viejo Leo". / F. V.

El "Viejo Leo" siguió jugando a la tragaperras hasta las 18.15 horas, cuando las cámaras lo captaron saliendo del local, "zigzagueando", según los atestados policiales, en los que se constata que "Oscarín" se fue del bar siete minutos después "negando con la cabeza". El cuerpo sin vida de Leónidas Laborde, apareció el 20 de diciembre en la cocina de la vivienda que compartía con "Oscarín", un tercer piso del número 17 de la calle Fuente la Braña, después de haber pasado parte de la noche anterior jugando a la ruleta en una casa de apuestas de La Corredoria. El "Viejo Leo" presentaba una cuchillada en el corazón.

Extractos bancarios

Tanto el hermano de "Oscarín" como su mujer, la cuñada del acusado, declararon en los juzgados que Leónidas Laborde llevaba tiempo pasando por un estado de depresión y que incluso se estaba medicando. Ambos aseguraron que el "Viejo Leo" todavía seguía muy afectado por la muerte de un hijo suyo, fallecido en el año 2015, y que ese estado lo agravaban sus reconocidos problemas con el juego. La familia de "Oscarín" sostiene que el fallecido les reconoció que en alguna ocasión "había intentado quitarse la vida", un testimonio que refuerza la teoría del suicidio de la defensa. En este sentido, la jueza que instruye el caso ha solicitado informes para saber si el "Viejo Leo" pudo clavarse el cuchillo a sí mismo y para corroborar si estaba recibiendo tratamiento médico para la depresión.

La familia de Leónidas Laborde, por su parte, asegura que el fallecido no pasaba por ningún tipo de depresión y que no pudo autolesionarse. Su entorno cercano reconoce que el fallecido "era jugador", pero también defiende que "no tenía deudas con nadie" y que la posibilidad de que el móvil "del crimen" sea económico no se les pasa por la cabeza, una opción que, sin embargo, no descarta el abogado de "Oscarín" para poner sobre la mesa la teoría de la participación de terceras personas. El informe solicitado por la jueza sobre la cuenta bancaria de Óscar Sánchez refleja que la tarde anterior al crimen Leónidas Laborde sacó 450 euros del cajero "para los gastos" de "Oscarín" –le administraba 15 euros al día– y que en la cuenta sigue habiendo más de 12.000 euros. "Si hubiese estado ahogado por las deudas o sus problemas de juegos fuesen extremos habría cogido ese dinero, pero no tocó ni un euro", dice Fernando Barutell, que sigue defendiendo que todas las pruebas apuntan a "Oscarín" como autos de la muerte del "Viejo Leo".

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents