La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Los significados de Sanjurjo

Análisis de las tres exposiciones del pintor asturiano

Bernardo Sanjurjo inunda de color la ciudad de Oviedo con tres exposiciones con significados diferentes. Definir la del Museo de Bellas Artes de Asturias es un reto dado que confluyen varias categorías del sistema del arte: inspiración, emoción, posibilidad de conmover. Y técnica que ha sido crucial para dominar la espacialidad, luz/sombra, color, gesto, materia y tiempo (en proceso de ejecución). Conduce la muestra el sentido estético y coherencia en producción (se da el encuentro con algunas obras del pasado que dialogan con las más actuales). Como escribe Antonio Gamoneda “a la escucha del mundo bajo una piel trabajada por dedos silenciosos“, es el motivo de fondo enlaza el recorrido expositivo y tiene eco en el título de la de Bernardo Sanjurjo. “Piel Trabajada 4.3-30 5. 2021”.

Los cuadros expresan una emoción sin límite; son una definición para el significado atribuido; aceptando la idea de entender la exposición como signo lingüístico, nos dicen algo inmaterial, además de buscar una complicidad con el espectador. Hay elipsis y la belleza se expande. Las obras poseen determinación, color, gesto y materia, son un nudo estético.

Es una exposición donde la verdad del pintor abstracto se refleja más allá del mundo que existe, hay realidad escondida y autenticidad en la ejecución.

El excelente catálogo amplía además la experiencia de la visita.

Por su parte, en la exposición en la Universidad de Oviedo, presentada el 11 de marzo, Sanjurjo mostró agradecimiento: a poetas por la complicidad hallada; una explícita gratitud al equipo anterior al actual rector que acogió el proyecto; dio las gracias a la comisaria, María del Mar Díaz, profesora en esta Universidad y personal de gestión de la sala de exposición; al diseñador del catálogo. Y extendió finalmente el agradecimiento al público asistente, entre el que se encontraba Xuan Bello, cuyo poema y paralelas serigrafías abren la exposición.

Sanjurjo, en la inauguración de su muestra en el Bellas Artes. | Irma Collín

En el espacio central se constata sensibilidad y belleza y, se verifica cómo el color invade el poema y la poesía marca el gesto en la serigrafía. El resultado es un diálogo fluido y cómplice. Se presentan serigrafías y poemas en el mismo formato, hay un poema manuscrito con grafía de Antonio Gamoneda: Más allá de la sombra (2002) acompañado por dos serigrafías de las realizadas por Sanjurjo. “Herrumbres” (2004) de Marcos Canteli impacta por el potente mensaje alumbrado con dos serigrafías –negros con transparencia e inversión de mancha–. “Hay un mundo imposible” (2006) del poeta José-Miguel Ullán, con un verso que dice ¡uf¡, expresión coloquial de nuestro tiempo y las serigrafías asociadas poseen color de sangre. Rojo intenso y vivo para “Solo del animal” (2007), poema de Olvido García Valdés con acuerdo del verso “aprieta el tercer hueso los labios”. Dos serigrafías se exponen para el poema “Tríptico de la materia”, de Ricardo Menéndez Salmón, que tienen eco de sus versos como “túmulos, piedras, ley, muerte, basalto”.

Al buscar un significado para esta exposición una intuición me sugería la idea de entenderla como un haiku. Para ello, anoto cómo la pintura de Sanjurjo tiene cierto paralelismo con la forma poética del haiku. Este es un canto vinculante en sentido genérico: “tres versos preñados ya de sustantividad –con predominio del sustantivo, de lo sustantivo– soportando en su aparente fragilidad todo el peso del mundo” (Santiago Martínez 2021, La Escena). En esta exposición hay intensidad, armonía y espacialidad compensada. Las serigrafías conmueven tanto como lo hace el poema.

La tercera exposición es en la Escuela de Arte de Oviedo y se titula “ Bernardo Sanjurjo. Proceso y Taller”, centro que el artista dirigió entre 1975 y 1990, al que proporcionó la transformación necesaria para formarse en las artes plásticas incorporando potencial innovador. La exposición la defino como “oportunidad educativa” resuelta desde un discurso expositivo muy didáctico. Su objetivo es descubrir el proceso para realizar serigrafía. Está pensada para que los estudiantes del centro la visiten con sus profesores observando características de la técnica y el rigor en la ejecución. Si la mirada se fija en detalles de cartelas y anotaciones en negativos se percibe orden en la muestra para seguir el proceso de inicio a fin.

Cerramos con los versos de Antonio Gamoneda, en la presentación de la exposición de Sanjurjo “Pintura Germinal” (2010) en el Círculo de Bellas Artes de Madrid.

Bernardo:

Hazme un lugar en tu silencio,

préstame una gran lágrima negra

Quiero decir mis únicas palabras,

las indecibles, las que tú desprendes

de la sustancia a la luz

Compartir el artículo

stats