Mañana, día 11 de mayo, entran en vigor las medidas aprobadas por el gobierno español para fijar nuevos límites de velocidad de 20, 30 y 50 kilómetros por hora en núcleos urbanos. Sin duda, estamos ante una medida necesaria y que redunda en beneficio de todos los ciudadanos ya que, según los estudios llevados a cabo por la propia Dirección General de Tráfico, el riesgo de fallecimiento para un peatón en un atropello con un vehículo que impacta contra él a una velocidad de 30 km/h es de un 10%; tan sólo a 20 kilómetros por hora más, es decir, a 50 km/hora, el riesgo se dispara hasta un 90%.
En Oviedo, esta limitación no es algo que nos coja por sorpresa porque fuimos una de las ciudades pioneras en ponerla en marcha implantando, en el año 2010, las “Zonas 30” o “Carriles 30”. Además, siempre hemos mostrado nuestra apuesta por una movilidad sostenible, fomentando el transporte en bicicleta al incorporar a la ciudad como miembro de la «Red de ciudades por la bicicleta”.
En general, todo el centro urbano de Oviedo es “Zona 30” por lo que tiene limitada a esa velocidad la circulación. Además, en las arterias más importantes de acceso al casco urbano (Fuertes Acevedo-Avda. de Galicia, La Corredoria-Avda del Mar-Pumarín y Plaza Castilla-Calvo Sotelo) se han añadido los “Carriles 30”, mediante la correspondiente señalización horizontal y vertical, para llamar a la precaución en todas las calles de la zona.
Sin embargo, es preciso tener en cuenta que, según la propia DGT, todos los españoles tenemos la obligación de conocer los nuevos límites de velocidad en carreteras urbanas (20 Km/h en vías que dispongan de plataforma única de carretera y acera, 30 km/h en vías con un solo carril por sentido de circulación y 50 km/h en vías de dos o más carriles por sentido de circulación) por lo que los ayuntamientos no están obligados a poner las señales correspondientes en todas las calles. Según los expertos, no se trataría, por consiguiente, de inundar toda vía de tráfico con más número de señales, que podrían resultar redundantes y accesorias, sino de ubicarlas allí donde tendrán efectos clarificadores, atendiendo a criterios de economía y eficacia, dando verdadero sentido al concepto de seguridad vial.
No obstante, evitando llegar a esa redundancia de señales, todas aquellas nuevas actuaciones que en el Ayuntamiento de Oviedo se implementen en el marco de la movilidad y ordenación del tráfico, ya incorporarán las nuevas medidas aprobadas por el Gobierno, así como cuando se proceda a la reposición y mantenimiento de las actuales.
Estamos ante un nuevo paso para conseguir ciudades más seguras; un paso que requiere la colaboración, el compromiso, de todos a la hora de cumplir los límites de velocidad. Es una obligación y un derecho porque todos podemos ser conductores y peatones. Y, sin duda, es muy importante la educación vial y más en las nuevas generaciones. Ahí, desde Oviedo, estamos abriendo muchos y buenos caminos con un equipo de profesionales que tiene gran experiencia y que ha implementado técnicas y proyectos que están en la vanguardia de esta disciplina.
Los niños y todos los ciudadanos debemos ser muy conscientes de que se limita la velocidad para ampliar y mejorar la seguridad.
