Cualquier momento es bueno para visitar una de las zonas más bonitas de la costa oriental de Asturias, con un más que evidente atractivo turístico. Las paredes de la cueva de Tito Bustillo, en el corazón de la villa riosellana, reflejan la variada fauna que poblaba estas tierras en épocas prehistóricas. A su lado, el Centro de Arte Rupestre ofrece una amplia visión del entorno en el que se hicieron estas pinturas.

Ribadesella cuenta con un espacio urbano de calidad. Alrededor, un amplio paseo marítimo en el que el río, la ría y la mar acompañan el recorrido por la villa: el mirador de Guía y el paseo de la Grúa, con los llamativos paneles que narran la historia del puerto de Ribadesella; el paseo Princesa Letizia y el de los Vencedores del Sella; la playa de Santa Marina, con su sucesión de espectaculares construcciones de indianos levantadas a principios del siglo XX, y las icnitas de dinosaurios en la Punta´l Pozu. La zona rural del municipio ofrece interesantes visitas: la arquitectura popular y las casonas solariegas conviven con un paisaje rural salpicado de pequeñas calas de extraordinaria belleza, cuevas con espectaculares formaciones geológicas y espléndidos acantilados, con sus sorprendentes bufones.

Restaurantes y sidrerías, repartidos por todo el municipio, ofrecen una estimulante gastronomía en la que los pescados de extraordinaria calidad comparten mesa con otros excelentes platos propios de la cocina asturiana. En torno al río Sella, punto de encuentro de pescadores y piragüistas, se ha desarrollado una variada oferta de turismo activo, destacando los descensos en canoa por el río, así como la espeleología, el golf, el senderismo y los paseos a caballo.

Cada Viernes Santo la playa de Santa Marina transforma su arena mojada en un hipódromo natural. Se celebra allí la única carrera de caballos en playa del Principado de Asturias. Un espectáculo realmente fascinante tanto por su visión desde el paseo como por el sonido de las pisadas de los caballos cabalgando por la arena. Una cita ineludible que comenzó en 1989 y que se ha ido consolidando como una prueba deportiva a nivel nacional con importantes premios económicos. Esta Semana Santa las carreras se celebrarán la mañana del viernes, seguidas de una exhibición ecuestre, y la mañana del sábado, dando oportunidad a más público de disfrutar de tan grandiosa exhibición.