El premio Santa Catalina al mejor expediente de la Facultad Jovellanos, galardón que patrocina el Ayuntamiento de Gijón, recayó este año en Benedict Pickford Jones, alumno del grado de Turismo.

Benedict Pickford, al igual que el resto de jóvenes que finalizan su etapa en el Bachillerato, tuvo que enfrentarse a la elección de carrera. Según datos de un consultorio preuniversitario online de Fundación Universidad-Empresa (FUE) donde voluntarios universitarios asesoran a los futuros alumnos sobre las carreras, habiendo dado cobertura a casi 3.000 estudiantes de EBAU de toda España en sus dos ediciones, el 81% de los estudiantes que prepararon la EBAU el pasado mes de junio tenían pensado elegir la carrera universitaria por las salidas profesionales, siendo el segundo criterio más demandado que la universidad tenga unas buenas instalaciones –un 71% de los estudiantes–, seguido del sistema de becas que ofrezca la universidad de destino –un 57%–, que cuente con un campus grande (52%) y tener una formación sólida para afrontar la titulación –52%–. Todos los cumple la Universidad de Oviedo.

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Premios Santa Catalina y Santo Tomás 2021 de la Universidad de Oviedo

En cuanto a dónde estudiar la carrera, un 67% de los encuestados querían hacerlo en una universidad pública, y solo un 5% se decidía por la privada. A esto debe añadirse que un 76% de los estudiantes de EBAU encuestados se planteaba estudiar en su misma provincia.

“Antes y después” a raíz de la pandemia

Asimismo, este estudio desvela que la llegada de la crisis sanitaria causada por el Covid-19 ha cambiado las preferencias a la hora de elegir carrera y, por segundo año consecutivo, ha aumentado considerablemente la demanda de las carreras sanitarias frente a las titulaciones de ciencias jurídicas o las ingenierías. El cambio que ha supuesto la pandemia de coronavirus no sólo ha sido un reto para los futuros universitarios, sino también para las propias universidades debido a los nuevos modelos de educación virtual, calidad de docencia, plataformas online y nuevos protocolos. Y es que, según los expertos, la Universidad “supone mayores oportunidades de desarrollo, tanto personal como profesional. Es clave para adquirir conocimientos técnicos que luego ayudarán a la hora de aterrizar en el mercado laboral, pero también supone un enriquecimiento de otro tipo de factores, como la toma de decisiones o el alcanzar metas y asumir retos de forma constante», ha concretado.

En cuanto a la demanda laboral, un informe de 2019 de Adecco e Infoempleo desveló que los titulados universitarios siguen siendo los candidatos más demandados por las empresas en sus ofertas de empleo”. Concretamente, representaron el 38% de las ofertas. Un dato que asciende hasta el 42,7% si se tiene en cuenta los titulados en el siguiente nivel universitarios, es decir, con algún máster o posgrado. Unas cifras que concuerdan con las estadísticas del Instituto Nacional de Estadística, que registró en el último trimestre de 2020 una tasa de paro para las personas con carrera universitaria del 10,03% frente al 15,88% de los que solo han terminado Bachillerato. En el caso de las personas que únicamente han finalizado la primera etapa de sus estudios obligatorios, el porcentaje de desempleados crece hasta el 20,13%.