La cirugía de tiroides es lo que se conoce como "cirugía de excelencia", pues es necesaria una gran experiencia en ella con el fin de minimizar la posibilidad de complicaciones durante la misma.

Los procedimientos quirúrgicos sobre la glándula tiroides son el tratamiento adecuado en algunas patologías tiroideas, como por ejemplo nódulos tiroideos, glándulas tiroides grandes (bocios), hipertiroidismos, etc.

Este procedimiento quirúrgico se realiza bajo anestesia general y su duración varía dependiendo de si se trata de una extirpación completa o parcial. Existen principalmente 3 tipos de cirugías:

-Hemitiroidectomía: extirpación de la mitad del tiroides.

-Tiroidectomía total: extirpación de toda la glándula tiroides.

-Tiroidectomía subtotal: extirpación de casi toda la glándula tiroides.

Es recomendable realizar la cirugía de tiroides en los siguientes casos:

-Bocio: cuando el tamaño del tiroides provoca compresión a órganos vecinos. Los síntomas más frecuentes cuando el tamaño del tiroides aumenta son la dificultad para respirar (disnea) por compresión de la tráquea y para tragar (disfagia) por compresión del esófago.

-Nódulos tiroideos: en algunos casos, es necesario realizar una hemitiroidectomía (extirpar medio tiroides) con el fin de completar la información necesaria para el diagnóstico; por ejemplo, cuando al realizar una punción del nódulo no se ha conseguido tener un diagnóstico de certeza y hay dudas de si el nódulo puede ser maligno. Si se confirma la presencia de cáncer, suele ser necesario completar la cirugía con una tiroidectomía total (extirpar todo el tiroides).

-Cáncer de tiroides: La cirugía de tiroides (tiroidectomia total) es el tratamiento de elección. Afortunadamente, consigue curar más del 80% de los casos de cáncer de tiroides.

-Hipertiroidismo: Es una opción de tratamiento utilizada normalmente cuando no ha respondido al tratamiento farmacológico o existe un bocio de tamaño importante. Se realiza una tiroidectomia total para extirpar todo el tejido tiroideo hiperfuncionante. Después de la cirugía será preciso tomar tratamiento sustitutivo (con hormona tiroidea, para suplir la ausencia de tiroides).

Por regla general, los cuidados postoperatorios son:

-La estancia postoperatoria suele ser breve (2-3 días de ingreso).

-Dolor: El paciente deberá tomar analgésicos suaves durante una semana. No es una cirugía dolorosa, solo suele producir una molestia en la zona.

-Prevención de la hipocalcemia: El paciente puede requerir la toma de calcio en pastillas durante unos días. Las glándulas que controlan el calcio (las glándulas paratiroides), están en contacto con el tiroides, por lo que al realizar una cirugía sobre este último pueden reducir su función durante unos días, produciendo un descenso del calcio en sangre.

-Hormona de sustitución: normalmente, si se realiza una hemitiroidectomia, el paciente no precisa de tratamiento con hormona tiroidea después. En las tiroidectomías totales, es necesario tomar una pastilla de hormona tiroidea, al quedar el paciente sin tiroides.

-Molestias comunes: son transitorias, como cambios en la calidad de su voz, leve dolor de garganta al tragar la saliva, picor en la herida€

-Durante la primera semana se deberá hacer reposo relativo evitando realizar esfuerzo físico (levantar pesos€). A partir de la segunda semana, se podrá reincorporar a sus actividades cotidianas de manera progresiva, haciendo vida normal desde la tercera semana tras la intervención.

-Proteja la herida con un pañuelo o cuello alto hasta que el cirujano se lo indique, para evitar que la cicatriz se pigmente por la exposición al sol.

La Unidad de Otorrinolaringología del Centro de Cabeza y Cuello Dr. Llorente liderada por el Dr. Andrés Coca, cuenta con la experiencia, tecnología y recursos necesarios para la realización de cirugía de tiroides.