A la hora de sacar conclusiones habrá que buscarlas en el rendimiento colectivo e individual. En lo que se refiere al grupo, el Oviedo ha dado un par de pasos atrás en las últimas semanas. Arrasate, técnico del Numancia, insinuó que quizás la derrota en Ponferrada había dolido. Después de ese 4-2, a los azules les cuesta más salir de la cueva, irse hacia arriba. Pero en los números también se refleja el bajón de rendimiento de los delanteros en las últimas citas, sus datos individuales. Sumando ambos factores, la consecuencia más directa es que el Oviedo ha perdido eficacia: no ha hecho gol en los últimos 186 minutos de la competición.
Los de Egea acumulan dos partidos (ante el Bilbao Athletic y el Numancia) y seis minutos finales del choque en El Toralín sin celebrar un tanto. La sequía ha llegado justo cuando el técnico ha insistido de una forma más vehemente en que el equipo tenía que defender con más acierto. Parece una consecuencia del cambio de estilo. Aunque los azules sí lo han intentado con insistencia. Ante el filial, fueron 17 remates, 4 a puerta. En Soria, el equipo chutó solo 6 veces, una a puerta.
En Ponferrada, el equipo fue atrevido y ofensivo. Disfrutó de varias ocasiones para dañar la meta defendida por Santamaría. Pero se fue de vacío y con un saldo de dos goles a favor que fueron conseguidos de la misma manera: desde el punto de penalti. Porque en realidad, el Oviedo lleva ya 279 minutos sin marcar de jugada. El último tanto de esta naturaleza fue el de Cristian Rivera ante el Alcorcón.
La falta de gol está afectando de forma especial a los delanteros. Toché parece en estos momentos el delantero preferido por Egea en su esquema. Aunque el murciano ha perdido parte de la eficacia que lució en sus primeras titularidades: cuatro goles en sus tres primeros partidos de inicio. Ahora, Toché atraviesa su peor racha de la temporada. No ha marcado en los últimos 269 minutos de competición, desde que hiciera su segundo tanto ante el Alcorcón. Después, se quedó sin anotar en los 26 minutos restantes del partido ante los madrileños y ante Ponferrada (90 minutos), Bilbao Athletic (90) y Numancia (63). En este tiempo sin gol, el murciano lo ha intentado con 9 remates.
Linares acumula 208 minutos sin celebrar un tanto. En su caso, la sequía se alarga a los choques contra Numancia (31 minutos), Bilbao Athletic (74), Ponferradina (26) y los 77 minutos que siguieron a su tanto en Zorrilla, el último en el campeonato. Solo ha chutado una vez en este tramo.
La racha más negativa entre los arietes es la de Koné, que aún no se ha estrenado en la Liga. Aunque sí lo hizo en la Copa. El africano lleva 292 minutos en el césped sin anotar, todos los que ha jugado: 16 contra el Mallorca, 27 en Valladolid, 90 contra el Alcorcón, 66 en Ponferrada, 18 frente al Bilbao Athletic y 75 en Soria. Lo ha intentado en 9 ocasiones.
