El libro "Un derbi solidario" vive su cuarta entrega con una temática festiva. En esta ocasión, periodistas que siguen la actualidad del Sporting y el Oviedo narran diversos ascensos de los equipos asturianos más representativos. El diálogo que se reproduce en estas páginas es un extracto del capítulo que protagonizan Juan Mata, jugador del Manchester United y canterano azul, y Sid Lowe, periodista británico que impulsó en las redes sociales la exitosa ampliación de capital de 2012. El libro, que se presenta hoy y está patrocinado por Ediciones Nobel y Alsa, se puede comprar en las tiendas oficiales del Oviedo y el Sporting, en librerías y por internet. Los beneficios irán destinados a Mensajeros de la Paz.

-Sid Lowe: ¿Dónde estabas cuando subió el Oviedo?

-Mata: En Asturias. Vi subir al Oviedo, y vi a la gente celebrar. El primer partido no lo había podido ver porque jugaba a la misma hora. El de vuelta, sí. Estaba en casa de mis abuelos, que además está justo al lado de la Plaza de América dónde siempre se celebran los triunfos... Bueno, cuando los hay.

-S: Esta vez hubo, por fin...

-M: Cuando nos dicen que hablemos sobre "los ascensos" para este libro? mejor hablemos del más reciente, ¿no? Es que de otros casi ni me acuerdo... Hombre, recuerdo muchos no-ascensos y casi-ascensos. Está bien hablar de uno de verdad, ¿eh?

-S: ¡Buah! ¿A que sí?

-M: Yo lo veía ahí con mis abuelos. Y ver emocionado a mi abuelo era maravilloso. Es muy futbolero; le gusta desde siempre. Mi padre jugó, claro. Y yo. Y mi abuelo viene a verme jugar en Manchester, como ya hacía en Londres, y cuando empezaba en el Oviedo. Suele ir al Tartiere. Y ahí estábamos, lejos de Cádiz, pero muy cerca de la afición que se había quedado...

-S: Ya te veo: casa de los abuelos, camiseta del Oviedo, "Cervero" a la espalda ...

-M: No tengo.

-S: ¿Cómo que no?

-M: La de la temporada pasada, no. Las que tengo son de cuando estaba yo. De la marca Erima, ¿te acuerdas?

-S: ¡Sí! Creo que la tengo por ahí. Y la de los nombres de los socios. Tengo unas cuantas ya. Y, claro, la del 96-97, la de Joluvi con el cuello ese que se enrollaba siempre. Que no tengas tú la del ascenso...

-M: Creo que me hice fotos con ella alguna vez, o varias. Pero nunca terminé de llevármela. Se la habrá quedado mi primo, que trabaja en el club...

-S: ¿Tenías ganas de ir ?

-M: Sí, pero no pude, no pude... llegué el día anterior a Oviedo y tenía que irme el día después. No me daba tiempo. Fue una pena.

-S: Fue horrible. Lo vi con mis padres, que habían venido de Inglaterra, pero por la tele en Madrid.

-M: Lo curioso es que yo de nervios poco. Cuando empezó el partido lo viví con tranquilidad: el Oviedo dominó desde el principio y sí que tardó en llegar el gol, pero cuando marcó ya...

-S: Sí, sorprendió el control, la autoridad con la que jugaba. Pero no sé si esto me inquietaba más. Me decía: "no puede ser esto, no es normal... ya verás cómo nos la clavan". Pero no.

-M: A mí me tranquilizó el juego. Y cuando pitó el final, ya había gente abajo en la plaza. Se veía cómo llegaban. Salí a la terraza y los vi en la Avenida Galicia. Y el Bar Archivo, un bar muy oviedista. La gente en la calle, mi abuelo, mi abuela... Ver a la gente abrazándose, toda la felicidad. Me emocioné.

-S: ¿Lloraste?

-M: Jajaja. Me costó aguantarme, ¿eh? Estaba con los ojos medio lagrimosos.

-S: No sé si eso te ayudó a creértelo, ver a toda esa gente. Es que mi reacción fue más bien de, no sé, de no acabar de darme cuenta...

-M: En shock, ¿no?

-S: Eso, eso. Es que eran doce años, es que parecía imposible. La temporada pasada, la verdad es que empecé a dar por hecho que esta vez sí que subíamos pero luego, llegado el momento, era como algo irreal. Daba vueltas al salón. "Lo conseguimos". Ver a la afición tiene que haber sido la leche. ¿Bajaste a la calle?

-M: Sí, luego. Estuve un rato. Estaba todo el mundo emocionado. Estaban todos celebrando, esperando al equipo. Yo cuando bajé pensábamos que venían. Luego, más tarde, se supo que había problemas. Yo, hablando con mi primo y con mi padre, que también viajaba con el equipo.

-S: Pedí a los amigos que me guardaran todos los periódicos, y me mandaran videos. Conseguí ir al partido del campeonato, eso sí, una semana despué contra el Nástic, con ese golazo de Cervero. Tú el día después del ascenso cuando finalmente llegaron no pudiste estar con el equipo, ¿no?

-M: No. Tenía que marcharme el día después. No pude verlos. Me hubiera gustado estar con el equipo, y si hubieran llegado aquella misma noche los habría visto. Arturo me había invitado a celebrarlo con ellos.

-S: Admítelo: cuando marca David y pita el final el árbitro pensaste: "un paso más cerca mi vuelta al Tartiere...".

-M: Jajaja. En ese momento pensé: "por fin". No pensé en mí sino en la gente. Un paso más cerca, sí... Pero para que el Oviedo vuelva a Primera.

-S: ¿Para que puedas volver?

-M: Sería muy bonito para la ciudad y para todos juntar a varios jugadores que hemos salido y hacer un buen equipo.

-S: Esto lo firmamos ya.