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Proyección de play-off

Los números del Oviedo le valdrían para ser cuarto según los resultados de los últimos 5 años

Proyección de play-off

La palabra "ascenso" ha dejado de ser tabú. La familiaridad a la hora de hablar del objetivo más ambicioso tiene que ver con la evolución del Oviedo en la Liga. Al comienzo de la temporada, los de Egea eran vistos como un equipo aspirante, aunque con las cautelas típicas de un recién ascendido. Solo aparecía en algunas quinielas. El tránsito por la competición ha dado finalmente empaque al proyecto de Carso, el primero en el fútbol profesional, para el Oviedo. Ahora, el equipo aspira a lo máximo. La evolución del equipo le ha hecho rebasar el ecuador de la competición con 36 puntos. Si las cosas siguen igual de bien en la segunda vuelta, la proyección es de acabar la Liga con 72. Una puntuación que, viendo los precedentes más inmediatos, le otorgaría a los de Egea la posibilidad de luchar por el ascenso desde el play-off.

El sistema de play-off (dos equipos suben directamente y los conjuntos clasificados entre el 3º y el 6º disputan eliminatorias para subir) se instauró en la campaña 2010-2011. Desde entonces los números necesarios para ascender han fluctuado cada campaña. La proyección de 72 puntos del Oviedo le situaría a final de temporada quinto la temporada pasada, campeón en la 2013-14, cuarto en la 2012-13, quinto en la 2011-12 y tercero en la 2010-11.

Echando un vistazo a las medias de las últimas cinco temporadas, la proyección de 72 puntos le valdría al Oviedo para ser cuarto. La media de los primeros clasificados es de 82,2 puntos. El mejor campeón fue el Deportivo, 2011-12, con 91 puntos; y el peor, el Éibar, 2013-14, con 72. El segundo suma una media de 78,4 puntos en los últimos cinco años. El tercero, 75. Para ser cuarto se necesitó una media de 71,2 puntos. Los quintos lograron sumar 69. Y para ser sexto, fueron necesarios 67,6 puntos.

Un factor a tener en cuenta es que el ritmo de los equipos punteros es este año menor que el de las ediciones más recientes. La igualdad es máxima ahora y cuesta más sumar hacia la cima. Se ve en un ejemplo. El Alavés es líder con 39 puntos finalizada la primera vuelta. Esa puntuación le hubiera hecho estar fuera de las posiciones de ascenso a estas alturas en las temporadas 2014-15, 2011-12 y 2010-11, en las que el ritmo era más alto.

Pero al margen de la estadística hay otra idea que se debe analizar: la evolución al alza del Oviedo. Los de Egea atravesaron al comienzo de año una etapa de adaptación al nuevo escenario, una búsqueda intensa de su identidad. La encontró en el último tramo de la primera vuelta. También aquí hablan los números. Los de Egea sumaron 15 puntos en las diez primeras jornadas, con 18 goles a favor y 17 en contra. En la búsqueda de la mejora quedó detectado el principal problema: la endeblez defensiva. Mejoró en ese momento el equipo. El saldo de la segunda parte de la primera vuelta (jornadas de la 11ª. a la 21ª.) fue de 21 puntos, con 11 goles a favor y 6 en contra. Teniendo en cuenta este ritmo (1.9 puntos por choque el Oviedo acabaría la Liga con 76 puntos, un pasito más cerca del ascenso.

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