A Borja Valle se le ve tan cómodo esta temporada que empieza a extenderse la impresión de que es mejor en Segunda que en Segunda B. Un caso similar al de David Fernández: futbolistas tan capacitados para la adaptación que mejoran las expectativas creadas. "No sé si este año estoy mejor que el pasado, la verdad", analiza el berciano, "pero lo que sí sé es me estoy encontrando muy bien".
Para resolver el debate, las estadísticas siempre ofrecen una guía útil. La temporada pasada, la que acabó con el ascenso, Valle disputó 21 encuentros, 18 como titular, y anotó 9 tantos. Ahora, rebasado el ecuador de la Liga, suma 15 encuentros (11 como titular), con 5 goles. Los números son muy similares y demuestran que siempre que ha estado disponible (las lesiones también son comunes en sus dos campañas), el berciano ha sido indiscutible en los esquemas del Oviedo. "Lo primero que tengo que hacer es agradecer al entrenador por la confianza que me está dando. Cuando estoy disponible ha contando conmigo y eso me hace sentir importante", relata Valle.
Lo que las estadísticas no revelan es un acoplamiento a la categoría sin ninguna fisura. Valle actúa esta temporada con la misma naturalidad que ha tenido desde que llegó al Oviedo. Parte de la banda izquierda pero su influencia alcanza al centro del campo y la delantera. Al trabajo y talento, le suma capacidad anotadora. El sábado lo demostró: balón en el área y disparo seco, abajo, para batir a Pacheco. El gol ponía por delante al equipo azul pero un despiste a la vuelta del vestuario truncó los planes de victoria. "El del Alavés es un resultado que nos castiga. Estuvimos tres minutos fuera del partido, nos penalizó en exceso. El partido fue muy bueno contra un gran rival", defiende el centrocampista. "Lo hicimos bien durante 87 minutos: con un nivel alto, creando ocasiones. Debemos seguir en la misma línea que ante el Alavés".
El Oviedo ha logrado cerrar el complicado mes de enero sin ninguna derrota. Ha acumulado una victoria y cuatro empates pero ha dado la cara en todos los escenarios, algunos tan complicados como El Sadar o Butarque. Cuando se le pregunta a Valle si hubiera firmado estos 7 puntos sobre 15 posibles, el berciano duda, pero saca conclusiones positivas: "No sé si hubiera firmado los resultados de enero pero sí hubiera firmado la situación actual en verano. Estamos contentos por no haber perdido en los últimos ocho partidos y por no descolgarnos".
Superada la cuesta de enero, toca encarar un mes con rivales de menos nombre. Pero en Segunda nunca puedes fiarte de la tabla. "Salimos de enero con buenas sensaciones, pero no me fío de los próximos rivales. En la segunda vuelta, los de abajo aprietan más y no puedes relajarte", indica.
