Luis César Sampedro hizo una particular lectura de lo sucedido en el Belmonte minutos después de que el Oviedo empatara en el descuento. "Ellos han tenido la pelota, sí; pero porque nosotros lo hemos querido", explicó con gesto contrariado por los dos puntos perdidos en el último suspiro. "No queríamos el balón, preferíamos tener los espacios y hacer daño a la contra", añadió. Independientemente del debate de si fue el Oviedo el que se hizo con la posesión y maniató a los manchegos o si sucedió por voluntad de los locales, el ejemplo del Belmonte vuelve a demostrar que el equipo de Egea está cómodo con varios registros. Lo suyo no es una propuesta inamovible.

En Albacete, el Oviedo fue dominador de la pelota con el 63% de la posesión, un dato que no se ha dado en muchos escenarios esta temporada. En el último mes, por ejemplo, los azules han alternado partidos con dominio, con otros con los que han preferido esperar. Ante el Alavés se vio al Oviedo mandón (57% de balón) pero ante el Lugo fue un registro diferente: 47% de posesión para los azules. En Pamplona y la semana anterior contra el Zaragoza, llegó en ambos casos al 48%. Contra el Leganés en cambio, y forzado por ir detrás en el marcador, el equipo de Egea disfrutó del 52% del control del esférico. La lectura es que, independientemente del guión, el Oviedo se ha acostumbrado a sumar.

Influyó en la versión más dominadora de los azules en Albacete el resultado pero la elección de futbolistas también tiene su importancia. El dominio se intensificó en la segunda mitad, con las decisiones desde el banquillo. Míchel sustituyó a Bedia, que aún necesita kilómetros para mostrar su mejor versión, y ayudó a encontrar vías al área rival. La presencia de Cervero también tuvo influencia: menos móvil que Koné, el nueve sirve para fijar a los centrales y que Toché tenga algo más de libertad.

El equipo descansó ayer tras el esfuerzo del Belmonte y el largo viaje de vuelta pero esta mañana empezará a preparar el partido ante el Tenerife del próximo domingo, 17.00 horas. La primera duda que asalta a Egea es la configuración del centro del campo. Para la cita ante los insulares, el entrenador no podrá contar con Erice, vio la roja directa, ni con Bedia, acumula cinco amarillas. Tocará volver a inventar el centro del campo.

La de los pivotes es la línea que suele marcar el estilo. Las piezas que le quedan libres en esta zona del campo a Egea siguen siendo numerosas. Míchel es la novedad de los últimos días. Llegado en el mercado de invierno, demostró en Albacete que ya cuenta como uno más. Junto a él, el candidato más firme pare regresar a la titularidad es el juvenil Rivera, un seis clásico con salida de balón. Omgba parece relegado a un segundo plano mientras que Font propone la opción más imaginativa. Incluso no se descarta para recibir al Tenerife a Vila. En las últimas sesiones ha ido intensificando su recuperación en El Requexón y, aunque aún no se ha ejercitado con sus compañeros, cada vez se le ve mejor de la rotura de fibras que le mantiene al margen.