Pocas cosas se conocen aún del método Generelo. Al nuevo entrenador del Oviedo no le gusta enseñar sus cartas y para analizarlo hay que observar los dos partidos en los que le ha tocado hacer la alineación. Y en los dos ha recuperado la dupla que formaban Koné y Toché en ataque. Una pareja que había jugado durante muchas jornadas y que en los últimos partidos con Egea al frente del equipo había empezado a ponerse en cuestión.
En la primera ocasión, la derrota (1-0) ante el Alcorcón, el resultado no fue el deseado. Un mal partido del Oviedo en líneas generales. El conjunto azul venía de una semana difícil y lo que sucedió en el campo quedó en un segundo plano. El Oviedo sumaba su tercera derrota, Generelo aún no estaba confirmado como el entrenador que dirigiría a los azules hasta el final de la temporada y todo parecía en el aire.
Pero fue en la victoria (3-0) ante la Ponferradina en la que Generelo, ya confirmado por Arturo Elías, pudo insistir en su idea de dos arietes y encima acompañarla por una victoria que le sirve de aval. La elección de colocar a dos delanteros tiene su miga. Una de las cosas que había hecho dudar a Egea de esa idea fue la llegada de Míchel. Un centrocampista que buscaba ubicación y que parece que con Generelo ya la empieza a encontrar. El valenciano ha sido uno de los dos mediocentros en los dos partidos que ha estado Generelo. La pareja que venían formado Erice y Vila toda la temporada puede que ya no se repita tanto en los siguientes partidos. El compañero de Míchel en Alcorcón fue Vila, que vio la quinta amarilla, y el sábado ante la Ponferradina Jon Erice.
Acaba la sequía de Toché
Para que el Oviedo funcione parece claro que necesita la mejor versión de Toché. El delantero murciano está cuajando una gran temporada. Lleva 14 goles y es el tercer máximo realizador de la categoría. Pero el ariete no estaba atravesando su mejor racha. En las cinco jornadas anteriores a la victoria ante la Ponferradina no había marcado ningún gol siendo titular en todos los partidos. En algunos de ellos como única referencia ofensiva. El resultado fue que en esos cinco encuentros el Oviedo sumó una victoria, un empate y tres derrotas.
Aparecen nuevos actores
Una de las sorpresas que dejó la alineación que presentó el Oviedo ante la Ponferradina fue la irrupción en el once titular de Fernández y la continuidad de Miño como portero, con Esteban ya recuperado. El lateral derecho cordobés, uno de los más señalados por la afición tras la salida de Egea, se quedó en el banquillo ante el Alcorcón y el puesto lo ocupó Nacho López al estar Diegui Johannesson con algunas molestias físicas. Ya recuperado el canterano azul de sus molestias no sólo no recuperó su puesto en el once sino que se quedó fuera de la convocatoria. Fernández, que sufrió los pitos de algunos aficionados durante buen parte del encuentro, cumplió y puede que con Generelo haya llegado su momento en la temporada.
La suplencia de Esteban tampoco pasó desapercibida. El guardameta avilesino ha sido fijo desde que regresó al Oviedo, en Segunda B, y renunciara a seguir en Primera en el Almería. En el partido que los azules perdieron (2-4) ante el Valladolid tuvo que ser cambiado por un golpe. Las consecuencias del golpe le dejaron fuera ante el Alcorcón. Su lugar lo ocupó Miño y lo siguió haciendo ante la Ponferradina ya con Esteban recuperado.
