Asumida la decepción por el intento fallido de meterse en play-off, el Oviedo encara la última semana de competición con la sensación de que se avecinan cambios importantes. El cierre del curso también supondrá la despedida de algunos futbolistas. Diego Cervero, capitán, es uno de los que acaba su vinculación el 30 de junio. "El del sábado puede ser mi último partido con el Oviedo, soy consciente de ello. La temporada pasada jugué poco y ésta menos. Sería un sueño que pudiera continuar en el Oviedo pero ya soy mayorcito para entender cualquier decisión que tome el club al respecto. Estoy agradecido al Oviedo, por haber participado en el ascenso y haber podido jugar en el fútbol profesional", aseguró el delantero en la sala de prensa del Tartiere.

El futbolista contuvo las lágrimas en algunos momentos, como cuando comentó que "muchas veces habló con mis amigos y le digo que soy un privilegiado porque he logrado llegar a la Liga profesional con el Oviedo. Es algo que hay que valorar".

A la hora de analizar el desenlace de la temporada, el ariete coincide con la lectura de algunos de sus compañeros y asume la responsabilidad en la decepción. "Los responsables somos los futbolistas de la plantilla, porque se dio todo para que consiguiéramos algo muy bonito y no fuimos capaces. Cuando parecía que se podía soñar con las cotas más altas, perdimos partidos y no fuimos capaces de afrontar las derrotas. Caímos en barrena", indicó.