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Un hueco en la izquierda

El Oviedo juega con los tiempos del mercado, pero su prioridad es la llegada de un extremo zurdo

Linares presiona a Lucas durante el amistoso del primer equipo ante el Vetusta. MARÍA GÓMEZ

La planificación siempre está condicionada a las tendencias del mercado, los movimientos que en ocasiones llegan de forma escalonada. Pero siempre hay una idea de fondo, una estrategia a la hora de configurar cualquier proyecto. En sus primeras intervenciones ante los medios, Hierro dio pocas pistas sobre el Oviedo que quería construir pero sí incidió en la idea del orden defensivo. Los equipos fuertes, se dice siempre, empiezan por una zaga de garantías. Precisamente la línea defensiva es la primera que ha cerrado el Oviedo que se encuentra ahora en un impasse en el mercado veraniego. La mayor parte de la plantilla ya está a las órdenes de Hierro pero aún quedan piezas por llegar. Piezas importantes para el ataque azul.

El vacío más evidente es el que existe en la banda izquierda ofensiva. El Oviedo cuenta con Susaeta y Ortiz como extremos específicos pero los dos, por sus características, se adaptan mejor a la derecha. En estos momentos, los azules no tienen ningún zurdo para el flanco izquierdo del ataque.

En el primer ensayo de pretemporada mostró la ausencia de futbolistas específicos en esa posición. Durante la primera mitad fue Linares el que tapó la izquierda, con libertad para lanzar diagonales y buscar el gol. Desde esa posición logró un par de tantos. Tras el descanso, el once se llenó de jóvenes futbolistas y fue Lula, lateral izquierdo del Vetusta, el que adelantó unos metros su posición. Incluso en caso de urgencias, el recién incorporado desde el Betis Varela podría hacer las veces de extremo izquierdo, ayudado por su técnica y vocación ofensiva.

El Oviedo sabe que necesita hacer un esfuerzo para cubrir la banda y el propio Hierro no esconde que la plantilla aún sufrirá retoques. Sin embargo el club no tiene prisa. La búsqueda de un futbolista tan específico no es sencilla y en el caso de que surjan opciones válidas, el interés de otros equipos de la categoría puede interferir. La prioridad está en el fútbol nacional, lo que facilitaría los periodos de adaptación, pero desde el Oviedo no se descarta la búsqueda en otros mercados.

Además de un extremo izquierdo llegarán más hombres de ataque. Si con el extremo no se tiene prisa porque las condiciones del mercado marcan los ritmos con el resto de posiciones la tranquilidad es aún mayor. Se considera que todos los puestos están cubiertos y que solo llegarían futbolistas que sean capaces de dar un notable salto de calidad.

El ejemplo más claro es la portería. A estas alturas, la meta parece perfectamente cubierta con la presencia de Esteban y Juan Carlos. Sin embargo, el Oviedo no descarta que, siempre que se den las condiciones idóneas en el mercado, la plantilla pudiera contar con un tercer guardameta que elevara la competitividad para el puesto.

La defensa sí parece un asunto cerrado y el centro del campo, con la excepción de la izquierda, también tiene alternativas de sobra. Los refuerzos que quedan apuntarán al foco ofensivo.

Y está además el asunto Michu. El club ya intentó un par de veces su fichaje la temporada pasada pero el futbolista prefirió empezar desde más abajo, probar su estado y encontrar sensaciones en el Langreo. El Oviedo siempre ha mantenido que las puertas del club están abiertas para el delantero y éste nunca ha dudado a la hora de expresar su oviedismo. Los caminos de ambos están llamados a encontrarse siempre que las condiciones físicas de Michu le permitan encarar la temporada con garantías.

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