Es por todos conocida la fijación que tiene Fernando Hierro con la línea defensiva del equipo. Parece que sus continuas charlas con los jugadores han surtido efecto y ellos van respondiendo a las expectativas.

El ejemplo más notable es el de Fernández. El cordobés ha vuelto a meterse a la grada en el bolsillo después de varios meses en los que estuvo en el punto de mira del aficionado carbayón.

En varias ocasiones el rechazo de los oviedistas hacia el lateral venía motivado por temas extra deportivos. El jugador andaluz sabía que solo el buen fútbol haría que se recuperase la confianza en él y ha decidido hablar sobre el terreno de juego.

En la segunda jornada de liga ha confirmado las buenas sensaciones y ha demostrado porqué el club apostó por un jugador que llegaba en la temporada pasada de Zaragoza con el cartel de estrella. Seguro con el balón en los pies, corrige sus despistes defensivos gracias a su velocidad e intuición.

En la tarde del sábado mostró su mejor cara y fue una pesadilla para la defensa almeriense. Con sus continuas subidas por banda derecha, propias del lateral moderno que tanto gusta entre los aficionados, rozó su primer tanto como oviedista y logró tornar los pitos en aplausos.

El propio jugador salía ayer a rueda de prensa y se mostraba "muy contento" con su rendimiento: "Fue uno de los partidos más completos que he disputado con esta camiseta. El equipo estuve muy bien en todas las líneas y eso siempre ayuda".

También reconocía que su buen estado de forma puede deberse al trabajo específico que realiza el nuevo cuerpo técnico con los defensas: "Es fundamental la ayuda de Hierro en nuestra preparación. tiene muchísima experiencia y siempre está pendiente de nosotros".

Las novedades tácticas le han sentado bien y admite que se siente "más cómodo" ya que ahora a los laterales se les exige "subir más al ataque" y ese es uno de sus puntos fuertes.

Otro de los motivos por los que continuamente está en el punto de mira es la competencia con Diegui, el joven lateral gusta mucho a la parroquia oviedista al ser un jugador de garantías y de la casa. A Fernández no le preocupa este tema ya que lo considera algo lógico dadas las dimensiones del club: "Las grandes aficiones siempre exigen mucho y eso es bueno. Yo me quedo con la parte positiva de todo lo que me ha ocurrido e intento mejorar día a día".

El próximo domingo, en Mallorca, Fernández tendrá su reválida, una nueva oportunidad para convencer al seguidor azul o para regresar al ojo del huracán.