Oviedo, José PALACIO

El entrenador del Oviedo, Fernando Hierro, reconoció que fue un partido de ida y vuelta en el que al Oviedo le faltó "continuidad y control del encuentro. Hubo algunas fases en las que hemos tenido algo más de fluidez, pero luego nos costó mucho tener una regularidad en el juego para hacer un partido completo".

Destacó además que "nos penalizaron pequeños detalles. Recibimos el primer gol en el primer córner en contra. Afortunadamente, empatamos pronto, pero en la segunda mitad, cuando salimos con un poco más de atrevimiento encajamos el segundo gol".

Para el técnico el punto conseguido es "de la afición. Ha estado fantástica, apoyando siempre al equipo y ha sido determinante para que empatásemos el partido".

Hierro reconoció que los partidos en el Tartiere "nos están costando mucho. Estamos trabajando en ese sentido, a nivel mental también. El Tartiere es nuestra casa y el peor enemigo que podemos tener es el miedo. Tenemos que mejorar para ver un equipo más suelto en nuestro campo".

Sobre el esquema que puso en liza, el mismo que en Cádiz, pero con distintos jugadores, dijo que "ellos tenían a dos medios centros, con Julio Alvarez, que se mueve muy bien entre líneas y hemos intentado cerrar más el medio del campo. El Numancia es un equipo muy trabajado, tiene personalidad con el balón y creo que nos faltó estar mucho más juntos y bascular más rápido a la hora de defender"

Hierro calificó el punto conseguido como "muy trabajado. Siempre es difícil sumar dos victorias consecutivas y nos tenemos que conformar con un empate ante un rival muy difícil que realizó un buen partido"