Los números defensivos del Oviedo siguen siendo el principal argumento para alabar su trayectoria en la Liga. Y la causa directa de que los de Hierro se hayan asentado en la zona de play-off: son cuartos, a un solo punto del ascenso directo. Una transformación sobresaliente en las últimas seis semanas que ha hecho que el Oviedo haya escapado de los puestos peligrosos y se haya encaramado a la zona noble. Lo hace apoyado en una defensa impresionante: los azules ya son el equipo menos goleado del fútbol profesional.
Juan Carlos solo ha recibido seis goles en los doce encuentros disputados hasta la fecha. Los dos goles que encajó el Reus el pasado fin de semana (derrota 2-1 en Huesca), dejan a los de Hierro como el equipo menos batido de Segunda. Tampoco hay ningún equipo de Primera que mejore sus registros. El Atlético de Simeone, símbolo de la defensa más fiera del panorama europeo, recibió dos tantos en su duelo ante el Málaga (4-2) para dejar su registro en seis goles en contra después de diez partidos disputados. Los colchoneros reciben una media de 0,6 goles por partido y el Oviedo, 0.5 por encuentro. Les siguen en rendimiento defensivo el Reus (0,66 goles en contra por partido) y el Villarreal (0,7), todos ellos, equipos de la zona alta de sus competiciones.
