En medio del titubeante inicio de temporada del Oviedo, una de las mejores noticias tuvo nombre y apellidos: Fernando García Puchades, Nando para el oviedismo. El menudo extremo, 22 años, causó muy buena impresión en los primeros choques por su valentía, descaro y atrevimiento. Los cinco primeros partidos los jugó de titular, tres de ellos completos. Fue suplente ante el Reus (0-1) y titular de nuevo en Cádiz, el día en que Hierro cambió el sistema. Desde entonces, no volvió a ser titular y lleva cuatro partidos seguidos sin convocar. "Es un chico joven que vino a un nivel extraordinario", dijo ayer Hierro, que admitió que tuvo una conversación con él. "Necesita el cariño que él sabe que tiene y estas últimas semanas está volviendo a ser el jugador que tuvimos durante un mes y medio: explosivo, con descaro, que desafía, que encara", dijo. "Estamos cerca del mejor Nando, es un jugador importante", concluyó.