El Real Oviedo recupera sensaciones tras la dura derrota de la semana pasada en Huesca. Y lo hizo de la mejor forma posible. Ante un líder que llegaba al Tartiere en una forma arrolladora y ante la mejor entrada provisionalmente de la temporada en el municipal ovetense.

14.361 espectadores que disfrutaron de una victoria convincente en la que los azules sacaron a relucir sus mejores virtudes, seguridad defensiva y calidad en la resolución de sus jugadas de ataque.

La lesión de Toché hacía prever cambios en el once de Fernando Hierro pero el técnico local optó por la continuidad. Solamente los dos cambios obligados y además hombre por hombre. Verdés por el sancionado Gil y Pereira como delantero centro por Toché.

El gallego se convirtió en uno de los protagonistas del encuentro. Participando en todas las jugadas de ataque y dando frescura y continuidad al juego ofensivo.

El juego del Levante en la tarde de hoy da aún mayor realce a la victoria de los de Hierro. Desde el comienzo los levantinos salieron decididamente en busca de los tres puntos. Fue un primer cuarto de hora donde los de Muñiz quisieron poner sus credenciales sobre la mesa.

El Oviedo no se arrugó y apeló a su contundencia defensiva y solidaridad de todos sus hombres para superar ese trance. Una vez superado, el encuentro se igualó. El equipo asturiano cada vez se sentía más cómodo en un encuentro de calidad pero con pocas llegadas a las áreas.

La mejor ocasión de esta primera mitad fue azul. En una gran jugada al primer toque, en el área rival, Linares acabó rematando con el interior. El balón superó al portero pero terminó por impactar en el larguero de la portería.

Sin muchas más llegadas se llegó al descanso. Apenas un disparo de Campaña y un libre directo de Susaeta que se fue fuera por poco.

La segunda parte fue más abierta y ofensiva por ambos contendientes.

Michu la tuvo de cabeza al poco de la reanudación obligando a una gran intervención a Raúl. Respondió el Levante pero poco después Michu inauguraba el marcador de cabeza.

Corría el minuto 60 cuando un pase al espacio de Susaeta era controlado por Pereira. Su disparo fue despejado por el meta rival pero el balón terminó de nuevo en sus pies. Jonathan envió un globo al área pequeña para superar a Raúl y allí Michu se impuso por alto para marcar el primero.

Todo pudo cambiar en el minuto 71. El Levante casi logra el empate en una muy clara ocasión y casi en la jugada siguiente era Pereira el que con un toque sutil y de calidad aprovechaba un centro de Christian Fernández para prácticamente finiquitar el encuentro.

A partir de entonces el Real Oviedo se replegó y aguantó las múltiples llegadas del Levante al área local. En su mayoría fueron bien defendidas por los zagueros azules y en última instancia por un inspirado Juan Carlos que tuvo poco trabajo pero que resolvió con éxito.

Victoria de prestigio del Real Oviedo ante un gran rival que demostró el porqué de su liderato. Tres puntos de confirmación que meten a los ovetenses provisionalmente en puestos de ascenso directo.

Gran ambiente en el Carlos Tartiere y desplazamiento la próxima semana a tierras madrileñas para enfrentar a la AD Alcorcón el sábado a las 18:00h.