Fernando Hierro, entrenador del Oviedo, hizo ayer en sala de prensa lo que se esperaba: hablar lo máximo de fútbol y lo mínimo de las otras cosas. Las otras cosas son el cruce de comunicados entre Oviedo y Cádiz a costa de "los 155" que ha marcado irremediablemente la previa, un episodio que el técnico ha querido separar de lo que espera mañana en el Carlos Tartiere. "Nosotros pensamos exclusivamente en el fútbol", dijo ayer en El Requexón.

Sucede que como la intensidad emocional es inherenete al oviedismo, Hierro fue inteligente y volvió a apelar al Tartiere para un duelo en el que se prevé la mejor entrada de la temporada, a pesar de que las previsiones climatológicas no son buenas: "El partido recuerda un momento histórico de este club y la gente ha reaccionado muy bien. Ocurrirá como como en el partido contra el Getafe, que vinieron casi 18.000 personas. Es importante que seamos todos uno porque así los aficiondos nos llevarán en volandas", señaló el preparador malagueño.

Hace dos semanas, Hierro acertó en el pronóstico: dijo que ojalá asistieran al estadio 17.000 o 18.000 "locos" y fueron algo más de 17.600 que explosionaron con el gol postrero de Erice. Esta vez, con una nueva campaña de entradas baratas, se espera una cifra parecida o incluso cercana a los 20.000. "Espero que haya un gran ambiente, que venga la gente a animarnos y que nosotros podamos transmitirle esa pasión necesaria", señaló el preparador.

El técnico avisó que el Cádiz, que es el tercer clasificado de la categoría con dos puntos más que el conjunto azul, no es el mismo equipo que el de la primera vuelta al que el Oviedo ganó con comodidad en el Ramón de Carranza (0-2). Dijo que es un rival "muy completo" porque "al ser recién ascendido" juega "sin persión" por lo que "está sumando muchos puntos". Y concretó sus fortalezas: "Son rápidos y encajan poco fuera de casa. Me preocupan las transiciones, el balón parado, la línea del medio y los extremos, que son hábiles y rápidos", afirmó, además de destacar a Ortuño, "uno de los máximos goleadores" de la categoría.

Hierro dijo que aventura un duelo "difícil y directo", elogió al técnico rival, Álvaro Cervera y, como siempre, se guardó sus cartas sobre la alineación, en la que tiene la baja de Torró. "No va a ver sorpresas y no vamos a hacer muchos cambios", matizó.