El Real Oviedo volvió a dar la imagen más habitual de sus partidos a domicilio en un mal encuentro en el que fue ampliamente superado por el Rayo Vallecano y en el que apenas inquietó la meta rival.

Los azules llegaron 15 minutos al partido y en ese tiempo ya habían sufrido multitud de centros laterales, un disparo al palo y el penalti transformado por Ebert además de la lesión de Saúl Berjón.

Ante este resultado en contra, los de Hierro quisieron reaccionar pero el Rayo fue superior. Las entradas por las bandas de Lass y Ebert eran un peligro constante a la vez que todos los balones divididos caían del bando local.

Un único disparo, de Susaeta desde lejos y que obligó a Gazzaniga a una buena intervención, fue el balance no solo de la primera mitad sino de los primeros 85 minutos de partido por parte visitante.

El partido parecía igualado después de que los vallecanos bajaran su intensidad física pero controlaron perfectamente la situación y, más aún, tras conseguir Javi Guerra el segundo tanto al aprovechar el rechace tras una buena intervención de Juan Carlos en el minuto 60.

Las opciones buscadas por el técnico malagueño no dieron el resultado deseado. Ni la entrada de Varela en banda, ni la pareja de delanteros Michu-Linares ni la posición más retrasada de Borja Domínguez en el centro del campo.

No estuvieron ni más ni menos desafortunados que el resto de un equipo que finiquitó en Vallecas una muy positiva racha de resultados.

Solo en los últimos minutos la entrada de Nando y Pereira dio un poco de lucidez ofensiva a un Oviedo muy timorato en ataque durante todo el encuentro.

Ocasión desaprovechada por los azules que han visto como se les han acercado los rivales que le perseguían en la clasificación antes de un partido complicado como el que deberán afrontar los asturianos la próxima semana frente al segundo clasificado, el Girona FC.

Es de destacar la presencia en el terreno de juego de Carlitos que sustituyó al lesionado Berjón y que disfrutó de los primeros minutos con continuidad desde su fichaje. Dejó algún destello y basó su juego en los centros laterales desde la banda izquierda.

En resumen, mal partido de los ovetenses que deberán reflexionar sobre su actitud en los partidos a domicilio y que deberá hacer valer por enésima vez su fortaleza en el Tartiere para alcanzar el objetivo de la promoción de ascenso.