Rodeado de oviedistas, los ánimos suelen ir en aumento. La gala de reconocimiento a los socios con más de 50 años en el Oviedo sirve para reunir mucha historia del club y para afrontar el futuro con un punto más de optimismo. El que ponen los seguidores más fieles.
Jorge Menéndez Vallina, presidente del Real Oviedo encabeza el acto y atiende a LA NUEVA ESPAÑA en un receso. Con el equipo en la recta final de una temporada ilusionante y la ampliación de capital asomando en su fase abierta a terceros interesados, la realmente importante, la actualidad oviedista se bifurca en dos frentes. Aunque, explica el presidente, quizás los dos (lo deportivo y lo económico) puedan estar finalmente relacionados entre sí.
- Este tipo de actos le debe de hacer una ilusión especial a un presidente?
-Es una celebración muy bonita. Son 36 personas de las 43 que les tocaba a las que damos la insignia de oro después de 50 años de fidelidad al Real Oviedo, de buenos y de malos momentos y se trata de una distinción muy merecida.
- ¿Qué le transmiten los socios veteranos sobre la situación del equipo?
-Lo hablaba con muchos de ellos, todos tenemos una sensación diferente a la de la temporada pasada, que ya sabemos cómo terminó. Este año el quizás no empezó tan fuerte en la Liga pero va mejorando, va en ascenso, y eso es muy buena señal de cara a la resolución de la temporada. Siempre se ha dicho que los diez últimos partidos son los que definen los campeonatos, así que ojalá vaya todo bien en esta recta final.
- ¿Y sus sensaciones?
-Buenas. El pasado domingo perdemos en Tenerife pero salimos con una sensación positiva, se vio una buena imagen del equipo. Hemos ido resolviendo poco a poco las posibles deficiencias que podía haber y además el equipo se ha reforzado bien en invierno. Las perspectivas son buenas, pero esto es fútbol, nunca sabes lo que va a suceder. En Tenerife se vio el mejor ejemplo de lo que digo: el Oviedo fue intenso, peleó durante 90 minutos, no se dieron balones por perdidos, tuvimos ocasiones? Desafortunadamente la pelota no entró y nos fuimos con una derrota.
- ¿Cómo vio la jugada del famoso penalti?
-No vi que sucediera nada, como todo el mundo. Hay una curiosidad: cuando el equipo rival no se queja de la acción es que no es penalti. Nadie reclamó nada. Estaba con el presidente del Tenerife y nos miramos los dos diciendo "¿qué pitó?".
- El equipo trata de pasar página.
-Sí, esa es la idea. Pensar en el siguiente rival. Ojalá algún día los árbitros nos beneficien.
- ¿Cómo se interpreta en el club que Pérez Pallas fuera en un primer momento designado para arbitrar al juvenil?
-Fue un poco extraño. Parece ser que el nombramiento ya estaba hecho. Es raro sobre todo por una cuestión práctica: evitar cualquier tipo de problema que podría haber. Es más lógico lo que han hecho ahora, que dirija otro partido.
- A nivel institucional, ¿conviene expresar el enfado en el órgano correspondiente?
-Nunca se sabe si te va a beneficiar o no. Después de 42 partidos de Liga, los árbitros te dan y te quitan.
- La ampliación de capital entra en su fase decisiva, con la posible aparición de terceros interesados.
-Tenemos muy buenas perspectivas con la campaña. Yo creo que va a haber algún inversor, lo que no puedo decir es cuántos pero hay buen "feeling" con la ampliación. Ha habido gente interesada, que ya nos ha preguntado por la situación del club.
- ¿Más de un interesado en el Oviedo?
-Sí, ha habido empresarios de nivel que ya se ha interesado por la ampliación. Son de diferentes procedencias y, repito, de nivel. Hay que cerrarlo, vamos con cautela. Aún tenemos seis meses por delante de fase abierta y no es lo mismo que el equipo esté en Primera que en Segunda, un factor que puede influir a la hora de invertir dinero.
- ¿Cómo ve Arturo Elías la temporada?
-Está ilusionado, como todos aquí. Es curioso porque este año hablas con la gente y se palpa ilusión. También es verdad que hay muchas ganas por volver a Primera.
- ¿Veremos a Arturo Elías en Oviedo en el caso de que se juegue el play-off?
-Sí, seguro. Si hay play-off se anima a venir.
