En su intento por lograr el máximo compromiso de la plantilla, Fernando Hierro ha decidido incluir la palabra "final" en cada intervención ante los medios. La estrategia surgió hace dos semanas, con diez partidos por delante. Debates semánticos al margen (si pierdes una final no te queda más recorrido en una competición), el entrenador trata de delimitar el objetivo, centrarlo exclusivamente en la siguiente jornada. Mañana llega el Huesca, ¿después? No existe nada más. Solo importa lo del Huesca. Pero el partido ante los de Anquela demanda un grado superior. El Huesca es séptimo y navega a un solo punto de los azules. Es el principal perseguidor, apoyado en una magnífica racha de diez encuentros seguidos sin perder. Por eso, Hierro va un paso más allá: "Es el partido del año". El técnico quiere que todo el oviedismo; club, jugadores y afición; sean conscientes de la trascendencia de la cita.

"Es el más importante desde que yo soy entrenador", incide el técnico, para el que la temporada está suponiendo un curso acelerado en el mundo de los entrenadores. Las decisiones en la pizarra, en la intimidad del vestuario, se suman a otras habilidades: saber llevar a la plantilla, relacionarse con los árbitros, que el mensaje llegue a la hinchada? A este último factor, la afición, encamina el técnico parte de su discurso. "Ya sé que el horario no es bueno (mañana, 20.00 horas) pero pediría a la gente que aunque llegue tarde, que venga al campo. Nos va a costar ganar a un rival que llega en un gran momento, tras diez partidos sin perder, y les necesitamos. Nosotros vamos con nuestra alma, con nuestra fuerza. Nos estamos dejando la vida y necesitamos un Tartiere caliente", señala el entrenador del conjunto carbayón.

Hierro coincide con Christian Fernández en señalar a Samu Saiz como la mayor amenaza de los oscenses, Aunque el malagueño reparte elogios con sus compañeros: "Samu es uno de los mejores de la categoría,. Pero cuando un equipo lleva diez partidos sin perder es que tiene más cosas. Están Melero, Vinicius, Vadillo, los centrales? El entrenador tiene experiencia. Están trabajados, son intensos, sacan a relucir sus virtudes". El técnico tiene claro el equipo que quiere ver sobre el terreno de juego: "Quiero mi Oviedo, el que compite cada balón y se deja el alma. Me siento satisfecho con el rendimiento y el compromiso de mis chicos y eso es lo que espero ante el Huesca".

La primera experiencia del técnico en los banquillos está siendo satisfactoria, Lo dicen los resultados, con el Oviedo en estos momentos dentro del play-off, la tierra prometida. También el seguimiento a su labor. Desde Canarias se apunta a la posibilidad de que Hierro sea el entrenador que suceda a Quique Setién en Las Palmas. El entrenador tiene contrato hasta el 30 junio, con otra temporada opcional y el Oviedo confía en él para el proyecto del próximo curso. Él ya ha manifestado en más de una ocasión que quiere seguir liderando la misión. Por eso, no le presta importancia al presunto interés de otros clubes. "Estamos a dos meses del objetivo, no tengo ni un segundo para pensar en otras ocas. No podemos distraernos. Mi satisfacción es seguir este camino. Inicié mi carrera como entrenador aquí, este club me dio la oportunidad. Y quiero lograr el objetivo de pelear por las seis primeras plazas. No me lo quita nadie de la cabeza", señala el entrenador, inalterable en su discurso.