A diferencia de la temporada pasada, nadie en el Oviedo ha hablado de las bases de la próxima temporada. No se han escuchado pistas. El curso anterior, tras el decepcionante desenlace ante Osasuna y con la herida aún abierta, Joaquín del Olmo acudió a la sala de prensa del Carlos Tartiere para anunciar que desde entonces nacía el nuevo proyecto. Habló de decepción con el vestuario y de la llegada de un entrenador de prestigio y mano dura para enderezar el camino. Muchos interpretaron aquella intervención como el anuncio de una revolución en el vestuario, un cambio drástico en la configuración de la plantilla. El cambio se quedó a medias. Se produjo la salida de muchos futbolistas, pero el grueso de la plantilla permaneció. Ahora, con otro final agitado de temporada, el club no ha revelado sus planes para el último curso.

Los contratos influirán en la toma de decisiones: de los 26 futbolistas de la primera plantilla (incluyendo al meta del filial Alfonso Herrero), 14 tienen contrato en vigor para la próxima temporada: Juan Carlos, Alfonso, Johannesson, José Fernández, Christian Fernández, Varela, Erice, Rocha, Susaeta, Ortiz, Berjón, Toché, Linares y Michu. No quiere decir que todos vayan a seguir. Terminar su vinculación este mes Esteban, David Fernández, Verdés, Vila, Héctor y Pereira. Y regresan a sus clubes tras la cesión Costas (Celta), Óscar Gil (Athletic), Torró (Madrid), Borja Domínguez (Córdoba), Nando (Valencia) y Carlitos (Middlesbrough).

La idea de revolución en la plantilla vuelve a instalarse entre el aficionado azul, decepcionado con el desenlace. Es la ley del fútbol: siempre se demandan cambios cuando las cosas no salen bien. Sin embargo, el club deberá moverse hábilmente en los despachos para liberar algunos contratos. El tope salarial (el techo de gasto que la Liga indica para cada equipo en función de los ingresos y gastos previstos) influye de forma decisiva a la hora de construir la plantilla y las indemnizaciones para rescindir contrato son un gasto a tener en cuenta. Finiquitar la relación con varios futbolistas abonando sus contratos incrementaría la partida de gastos con influencia en el límite salarial. De ahí la importancia de llegar a acuerdos satisfactorios con el club. Se trata de no hipotecar la partida destinada a nuevos contratos.

La portería queda, en principio, cubierta con dos metas. Esteban, símbolo del oviedismo en la última etapa, acaba contrato con el Oviedo el próximo 30 de junio. Quiere seguir jugando y su prioridad, evidentemente, es el conjunto azul. La entidad aún no se ha pronunciado sobre su continuidad, al igual que con el resto de futbolistas. Todo depende del entrenador que asuma el reto. Su protagonismo esta temporada se ha reducido a un solo encuentro de Copa. Las dudas sobre su continuidad son evidentes. Juan Carlos llegó el pasado verano y firmó por dos temporadas. Alfonso Herrero, que ha jugado este año con el Vetusta, está unido al club hasta junio de 2019.

En la defensa se ve una carencia notable en la zona central. Ninguno de los cuatro centrales de la presente temporada tiene asegurada su continuidad. Costas y Gil estaban cedidos. David Fernández acaba contrato y Verdés, lastrado por las lesiones, no ha alcanzado el número de partidos para renovar. Los laterales sí están completos: Johannesson, José Fernández, Christian Fernández y Varela tienen contrato hasta la temporada que viene.

En la medular, tienen vinculación con el equipo Erice, Rocha, Susaeta, Ortiz y Berjón. Se negociarán algunos casos. El de Erice, apartado antes del último partido, es el más evidente: las dos partes creen que la salida es la única opción posible. Susaeta manifestó en Elche que quería sentarse con el club y Ortiz, sin apenas protagonismo, tiene difícil su continuidad. Los cedidos dependerán del criterio del entrenador. Vila y Héctor acaban contrato este verano.

Arriba, solo está clara la salida de Jonathan Pereira, que acaba el 30 de junio. Michu firmó hasta 2018 y a Toché se le renovó la temporada pasada otro año más. Linares acababa contrato este 30 de junio pero tiene una cláusula de renovación por partidos disputados y no se ha hecho público si los ha alcanzado. Sus 35 partidos jugados este año (26 como titular) parecen indicar que sí ha logrado la meta, con lo que tendría otro año.