El Carlos Tartiere rugirá más fuerte. Después de años de proyectos y meses de intensas reuniones, el grupo Symmachiarii logró ayer obtener la luz verde a la sectorización de una zona en el Fondo Norte que permitirá crear una grada de animación. La sectorización será provisional, al margen de la obra general que está proyectada para el estadio de cara al futuro, y se logrará con la instalación de vallas y personal de seguridad. Pero el objetivo se ha logrado. El Tartiere tendrá una zona de 1.200 butacas reservada para sus seguidores más entregados.

El fondo de animación es una iniciativa impulsada por Symmachiarii, y existente en muchos estadios del fútbol español y del extranjero, para reservar 1.200 butacas a seguidores que se comprometan a animar de forma activa durante los 90 minutos. A cambio, el club ofrecerá descuentos en atención a la edad, que se harán públicos durante la próxima campaña de abonados. El Ayuntamiento aún no había dado luz verde a su ejecución. Hasta ayer.

La situación se desbloqueó con una productiva reunión entre las partes en el Carlos Tartiere. Acudieron por parte del Ayuntamiento el Alcalde, Wenceslao López, y la concejala de infraestructuras, Ana Rivas, además de una técnico municipal. David Mata, gerente del Oviedo, representó al club, aunque también acudió al final del encuentro el presidente Jorge Menéndez Vallina. Estuvieron además Nacho Suárez y Antonio Bernardo, del grupo Symmachiarii.

La sectorización del Tartiere estaba enquistada por los trámites legales. El Ayuntamiento le había comunicado a los seguidores la imposibilidad de llevarla a cabo, incluso parcialmente, hasta que el Colegio de Arquitectos no diera su visto bueno. Ante la tardanza en la resolución y la necesidad de lanzar la campaña de abonados, el Ayuntamiento ha aceptado la propuesta de Symmachiarii de llevar a cabo una sectorización provisional, aunque algunas reformas podrán emplearse en el futuro.

El principal escollo planteado por los técnicos tiene que ver con las vías de evacuación. Ante la imposibilidad de solucionar el problema, se ha ideado una sectorización provisional. La delimitación consta de dos partes. La zona de la grada se separará con vallas que instalará el Consistorio y que podrían ser utilizadas en la futura sectorización del estadio. Para delimitar los pasillos se emplearán otros elementos temporales más sencillos (como cintas de separación) y con empleados de seguridad para controlar el acceso. La solución, subrayan desde el Ayuntamiento, es temporal. Si el informe del Colegio de Arquitectos es positivo, se llevará a cabo la sectorización de todo el estadio, una obra para la que ya hay reservada una partida municipal de 280.000 euros.

En la actualidad ya hay cerca de 1.100 personas apuntadas a la grada de animación y Symmachiarii espera completar el aforo, las 100 plazas restantes, en cuanto la entidad lance su campaña de socios, con precios reducidos para este espacio del Fondo Norte. Para formar parte de ella, solo existe un requisito, además de hacerse socio del Oviedo: ser mayor de 14 años. La experiencia echará andar a finales de agosto, con el primer encuentro de los azules ante su gente.