Anquela mueve sus piezas mientras repite insistentemente en que lo importante es la idea, la identidad de un equipo que casi desde el primer día lleva su sello. Hay principios que son innegociables. La intensidad, la entrega en el campo y el juego vertical forman parte del manual de instrucciones de los equipos de Anquela. Las variables llegan al elegir los hombres que lleven a cabo esas indicaciones. Hasta la fecha, el jienense ha empleado seis alineaciones distintas en las cinco jornadas de Liga y el encuentro de Copa. Pero los cambios en el once podrían acabar en Albacete. Por lo visto en el entrenamiento de ayer, y siempre que las lesiones respeten, Anquela podría emplear el mismo equipo inicial que derrotó al Cádiz en el Carlos Belmonte.

El jienense resumió el choque ante los gaditanos como "el encuentro más completo de la temporada". Valoró el técnico que se hubiera llevado a práctica todo lo previsto en la sala de operaciones donde Anquela disecciona a los rivales carbayones. El equipo respondió, cerró tres jugosos y el entrenador se fue con una satisfacción máxima. Ese 4-2-3-1 tiene muchas opciones de mantenerse.

Parece que la continuidad se mantendrá en los planes del técnico. La sesión de ayer sin mostrar claramente las cartas sirvió para intuir por dónde pueden ir los tiros este domingo. El cuerpo técnico dividió a sus jugadores en dos grupos. Anquela se quedó en uno de los campos llevando a cabo ejercicios que buscaban armonizar los movimientos en ataque y en defensa. El primer ejercicio dejó ver en el equipo con la posesión de balón un esbozo de parte del equipo inicial. Folch y Rocha actuaron como pivotes, con Yeboah abierto a la derecha y Berjón en la izquierda. Toché fijó a los centrales y Aarón Ñíguez se situó con más libertad por detrás del murciano.

Precisamente la función de Ñíguez se presenta como esencial en el buen funcionamiento del dibujo. Así sucedió en el choque ante el Cádiz, hasta que le aguantó la gasolina. El atacante fue una salida frecuente del balón y el encargado de enlazar con los hombres de arriba. De su asociación con Berjón nacieron las mejores opciones de los azules.

Ahora, la apuesta es mantener a Aarón en la media punta, la posición que ha estado más sometida al cambio desde el primer día. El doble pivote parece destinado a Rocha y Folch, ya que la pareja ha formado en todos los encuentros ligueros con la excepción del choque ante el Reus, cuando fue Hidi el acompañante de Folch. La lesión del húngaro ha devuelto a Rocha al protagonismo y el extremeño está alcanzado su mejor nivel desde que recalara en el Oviedo en el verano de 2016. En la izquierda tampoco hay debate, con Berjón en un momento de forma espectacular; y la misma conclusión hay que aplicar en la punta, con Toché en estado de gracia. Yeboah se mantendría como apuesta para la derecha por tercer encuentro consecutivo.

Con la defensa ya asentada en las últimas semanas, y siempre que Héctor Verdés esté en condiciones de participar en el partido, Anquela podría alinear en el Carlos Belmonte de Albacete un once formado por Juan Carlos; Cotugno, Verdés, Carlos Hernández, Christian Fernández; Rocha, Folch; Yeboah, Aarón Ñíguez, Berjón; y Toché.